Leo Atang, Adam Maca y Tiah Mai-Ayton han debutado bajo el sello de Matchroom en los últimos meses, con grandes expectativas para los tres talentos amateurs en sus respectivas divisiones.

El trío adolescente está programado para regresar el mes próximo, mientras que otro de su grupo de edad hará su debut profesional el próximo fin de semana: el respaldado por Queensberry, John Joe Carrigan.

El adolescente de Cumbria, cuyas redes sociales parecen un cuadro de honor con victorias a nivel doméstico, europeo y mundial, se muestra convencido de que su éxito continuará en el campo rentado, como el más reciente prospecto con aspiraciones de campeonato del mundo que espera materializar algún día.

Hecho profesional en mayo bajo la égida de Frank Warren, Carrigan esperaba una presentación antes de terminar el verano pero, en cambio, regresará a la capital escocesa para su debut, el mismo escenario donde se anunció su acuerdo con Queensberry durante la cartelera Josh Taylor–Ekow Essuman en Glasgow.

Está previsto que enfrente al polaco Dawid Przybylski (2-3, 1 KO) en un combate a cuatro asaltos en la subcartelera Nathaniel Collins–Cristóbal Llorente; el laureado amateur supone otra incorporación bienvenida para una división superwélter que necesita savia nueva en la escena británica.

El veredicto sigue pendiente sobre el talento de 23 años de Matchroom, Junaid Bostan, quien tendrá revancha con Bilal Fawaz por el título inglés vacante en el respaldo de Dave Allen–Arslanbek Makhmudov el 11 de octubre, tras su cruce del 30 de enero que terminó en polémico empate dividido.

Sam Gilley vs. Ishmael Davis, por honores británicos, está programado para la cartelera de Chris Eubank Jr–Conor Benn 2 el mes siguiente, entre dos boxeadores cuyo techo parece estar en nivel europeo.

Lo mismo puede decirse de los gemelos Fail, de 28 años, entre lesiones e inactividad en una coyuntura en la que el deporte favorece a quien está disponible —basta mirar al reciente verdugo de Davis, Caoimhin Agyarko.

“No quiero sonar engreído, pero de verdad creo que puedo vencer a cualquiera en el peso. Sé que aún soy joven y tengo tiempo, pero en mi cabeza, a quien me pongan delante lo seguiré venciendo como he hecho antes”, dijo Carrigan con confianza a The Ring.

¿Qué le da esa seguridad?

“Nadie me ha visto guantear como profesional —soy otra persona—; hago daño a los tipos en el sparring, hago daño a medianos, y con guantes de 10 onzas pongo gente a dormir. Obviamente empiezo con peleas de cuatro asaltos, pero estoy listo para hacer mucho más si hace falta”.

Escuchando los consejos del bicampeón mundial Billy Joe Saunders y codeándose con el N.º 9 de The Ring en semipesado, Willy Hutchinson, está claro que, además de su juventud, el chico de 18 años cuenta con una base alentadora desde la que arrancar.

En junio publicó fotos guanteando con el excampeón inglés de 154 lb, Lee Cutler, y cambió de gimnasio: ahora lo entrenan John Studds y Anthony Kelly en Tenacity Gym, tras una década en Border City ABC durante sus años de amateur.

Sobre el cambio, explicó: “Fue natural estar con John y Ant; John me preparó para el Mundial, me ayudó a conseguir sparrings y sesiones de manoplas —me ha encantado.

Soy el chico de 18 años más fuerte en 154 libras, no muchos pueden demostrarlo, y tengo pegada pero también sé boxear. Siempre fui escurridizo como amateur: hago fallar y hago pagar.

Miro al objetivo final: Vasiliy Lomachenko lo ganó todo —‘completó el boxeo’— y quiero ser como él cuando termine: un estilista con pegada, no unidimensional. Es importante tener plan A, B y C si las cosas no salen como quieres”.