Tras
fulminar a Erickson Lubin en el segundo asalto el pasado fin de semana, Vergil Ortiz se plantó cara a cara con Jaron Ennis en el centro del ring del Dickies Arena en Fort Worth, Texas.
Parecía la preparación perfecta para una pelea que lleva años cocinándose.
Por lo que se ve, todas las partes están interesadas en hacerla realidad. Y aunque todo apunta a un enfrentamiento a inicios de 2026,
Ortiz —el campeón interino del CMB y número 1 del peso superwélter según
The Ring— admitió recientemente que, aunque enfrentar a Ennis (35-0, 31 KOs) es una prioridad, también
le encantaría medirse con el excampeón unificado del peso wélter, Errol Spence.Al enterarse, Derek “Bozy” Ennis, padre y entrenador de Jaron, se mostró desconcertado, pero no molesto. Si el equipo de Ortiz quiere entretener la idea de una pelea con Spence, adelante; en su campamento solo tienen un objetivo.
“Si quieres pelearnos, entonces pelea”, dijo Ennis Sr. a The Ring. “Todo ese asunto de pelear con Spence y lo demás, eso es cosa de ellos. Ellos tienen que preocuparse por eso, nosotros no. Nosotros estamos enfocados en pelear con él.”
Spence, por supuesto, no ha vuelto al ring desde que fue dominado por
Terence Crawford en julio de 2023. Ennis, en cambio, está encendido.
El 11 de octubre en Filadelfia, Ennis hizo su debut en las 154 libras. El estilista ambidiestro, igual que Ortiz,
apenas sudó, deteniendo a Uisma Lima en el primer asalto.
En el pasado, Ennis ha expresado su deseo de convertirse en campeón en dos divisiones. Y a diferencia de su etapa anterior, quiere hacer más que unificarse: también aspira a la corona indiscutida.
Pero aun con esa meta, el número 7 del ranking superwélter de The Ring quiere a Ortiz como su próximo rival.
En cuanto a cómo se desarrollaría un megachoque entre ambos, Ennis Sr. reconoce el talento cuando lo ve.
“Vergil es un buen peleador”, dijo. “No se le puede quitar nada.”