El boxeo es una adicción de la que
Manny Pacquiao simplemente no puede desprenderse.
A sus 46 años y tras haber pasado los últimos cuatro alejado del ring, el excampeón mundial vuelve al ruedo en un regreso tan inesperado como largamente rumoreado.
Como muchos, Terence Crawford se frotó los ojos y revisó dos veces los titulares cuando se confirmó oficialmente la pelea. Luego de verificar que Pacquiao retomará su carrera el 19 de julio, Crawford dejó la sorpresa de lado y comenzó a analizar el combate.
Hace cuatro años, Pacquiao ya no parecía el de antes. Su movimiento constante y omnipresente se había reducido notablemente. Ese poder devastador que obligaba a sus rivales a mantenerse alerta… tampoco se hizo presente frente a Yordenis Ugás.
Crawford no llegó a decir que Pacquiao era solo una sombra de sí mismo, pero dejó claro que el “Pacman” en plenitud —ese que representaba un enfrentamiento de pesadilla— ya es parte del pasado.
Aun así, con reflejos más lentos y un arsenal algo mermado, Crawford cree que Pacquiao no tendrá miedo de enfrentarse a Barrios.
"Mario Barrios es un gran emparejamiento para Manny Pacquiao," declaró Crawford a Sporting News Australia durante su gira promocional la semana pasada.
La división de peso welter fue el dominio de Crawford hasta hace poco, antes de subir al superwelter tras consagrarse campeón indiscutido en las 147 libras en julio de 2023. No sorprende que siga de cerca lo que ocurre en la categoría que una vez dominó.
Barrios, quien ha defendido en dos ocasiones el cinturón del CMB que Crawford dejó vacante, no ha impresionado en sus últimas actuaciones. Mostró vulnerabilidades en su victoria por decisión ante Fabián Maidana en mayo de 2024, y estuvo cerca de la derrota en su empate dividido con Abel Ramos en noviembre pasado.
Crawford reconoce esas debilidades. Sin embargo, a pesar de los titubeos de Barrios (29-2-1, 18 KOs), no se atreve a darle la ventaja a Pacquiao de forma categórica.
"A esta edad, creo que es una pelea 50/50 para Manny Pacquiao."