La frontera sur con Grecia ha sido un camino muy transitado por muchos albaneses en el siglo transcurrido desde su formación, y para el adolescente Vlad Maca y sus cinco hermanos, eso significó una caminata de siete días hacia una nueva vida.

Pero mientras que sus hermanos estaban contentos con lo que encontraron en el siguiente país, Vlad quería algo más. Tras una breve estancia en Italia, pensó que era Inglaterra la que podría ofrecerle eso que estaba buscando.

No se aventuró demasiado una vez que pisó suelo británico, decidiendo establecerse en Brighton.

Ahora, décadas después, su hijo Adam, aproximadamente de la misma edad que tenía su padre cuando Vlad buscaba nuevos horizontes, está a punto de embarcarse en un viaje propio. Tal vez no hacia lo desconocido, pero el joven está convencido de que el suyo será igual de gratificante.

El miércoles 21 de mayo es el 18.º cumpleaños de Adam Maca y, por lo tanto, el día en que su vida como boxeador profesional comienza oficialmente, tras haber firmado un contrato a largo plazo con Eddie Hearn y Matchroom. Hearn, junto con el mánager de Maca, Sam Jones, han elogiado efusivamente el potencial del joven de 18 años, describiéndolo como un "fenómeno de la naturaleza" y tal vez el mejor talento adolescente de todo el Reino Unido.

Y aunque ambos tienen fama de usar hipérboles mediáticas, hay una sensación generalizada de que Maca es algo especial, dados sus logros en el boxeo amateur con los colores tanto de Inglaterra como de Albania.

Ahora, siguiendo con la temática, su debut profesional tendrá lugar en tierras extranjeras, en la cartelera del combate en el que Richardson Hitchins defenderá su título mundial contra George Kambosos, en el teatro del Madison Square Garden, el 14 de junio. Vlad, por supuesto, estará en primera fila.

"Él nunca ha faltado a un entrenamiento", dice Maca sobre su padre, quien lo lleva en coche desde su casa en Sussex hasta el gimnasio de Dan Woledge en Chatham, Kent, todos los días.

"Mi padre tiene su sillita en la esquina y no le gusta involucrarse en las cosas del entrenamiento. ¿Por qué llevaría a su hijo a un gimnasio diferente si va a ser él quien dé las instrucciones? Siempre se mantendrá al margen y dejará que los entrenadores entrenen."

Pero Maca dice que ha sacado fuerzas de la historia de su padre, que desembocó en la creación de una exitosa empresa de andamios en los años que siguieron a su viaje en solitario desde Albania, pasando por Grecia e Italia.

“Se fue de Albania cuando tenía 15 o 16 años”, dice Maca. “Sus hermanos se quedaron en Grecia, pero él no, él quería más. Siempre supo lo que quería, conocía su meta final y la hizo realidad.

“Y eso es lo que me motiva y me inspira ahora. Eso es lo que buscaré hacer en el boxeo. No pararé hasta conseguir lo que quiero.

“Cuando llegó a Inglaterra no tenía ni un centavo en el bolsillo y ahora dirige una gran empresa. Tiene las cosas que le gustan gracias al trabajo duro y la determinación. Y siento que eso corre por la sangre. Tenía más o menos mi edad cuando caminó hasta Grecia y ahora me toca a mí salir y hacerlo realidad.”

Así que mientras que una nueva vida y el crecimiento empresarial fueron la meta de su padre, ¿qué constituye el éxito para el joven Maca, de 18 años?

“Empezaré en peso gallo, pero quiero ir subiendo divisiones”, dice. “El plan ahora mismo es convertirme en campeón mundial en múltiples pesos, indiscutido más de una vez. A medida que crezca y me desarrolle, iré subiendo de categoría.

“Se están diciendo muchas palabras grandes y afirmaciones sobre mí, y eso es algo que espero. Si no dijeran nada sobre mí, entonces algo estaría haciendo mal.

“Creo en mi capacidad y si no lo hiciera, no estaría aquí. Quiero noquear a la gente, quiero llamar la atención. No quiero ser solo otro prospecto promedio. Todavía soy joven, así que el plan es llegar a 10, 12-0 y entonces empezaremos a mirar.”

“¿Entonces se tratará de quién es el número uno? Pelearía contra ellos mañana mismo. Creo que puedo vencerlos ahora mismo, pero depende de los demás, me están frenando.”

Un lugar en el Madison Square Garden de Nueva York podría parecer un sitio extraño para presentar a uno de los prospectos más emocionantes de Gran Bretaña, pero hay un método en esta aparente locura.

“Cuando hablaba con Sam antes incluso de firmar con él, me mandó una foto de Google”, dice Maca. “Era una captura de pantalla de la población de albaneses en Nueva York.”

“Siempre supe que era grande, pero oficialmente son alrededor de 200,000, aunque probablemente en realidad sean más. Sam me mandó un mensaje diciendo ‘tenemos que conseguir que pelees allá’, así que cuando vimos que el combate Hitchins-Kambosos iba a ser allí, todo encajó.”

Sus compatriotas Florian Marku y Nelson Hysa han logrado un gran apoyo de la comunidad albanesa en Gran Bretaña y, vestido con el negro y rojo de la bandera de su país, Maca espera conseguir algo de ese apoyo para sí mismo. Pero aunque su debut será en Nueva York, volverá a Gran Bretaña antes de que termine el verano.

“Cada dos meses,” añade. “Quiero mantenerme activo. He estado haciendo sparring con profesionales y han sido buenos. Si no lo fueran, aún no me habría hecho profesional. Creo que puedo vencer a cualquiera, pero ahora depende de mí demostrarlo.”

Sin embargo, primero, él y su familia celebrarán su cumpleaños número 18, pero no habrá descanso de la rutina dada la importancia de sus objetivos.

“Es miércoles,” dice. “Así que eso significa que entrenamos dos veces, una por la mañana y otra por la tarde.”

“No me interesa nada más. No bebo, nunca he bebido en mi vida. Solo me interesa mi objetivo final de ser campeón mundial indiscutido.”

“Beber y salir de fiesta no me emociona. No siento que me esté perdiendo de nada. De hecho, creo que las personas que están de fiesta se están perdiendo al no estar en el gimnasio trabajando para lograr una meta.”

“Estoy emocionado por lo que viene y sé que estoy listo. Tengo que bloquear el ruido, ignorar el bombo y mantener los pies en la tierra. Y siempre sé que mi padre me ayudará con eso.”