En los últimos 18 meses, el campeón pluma de la AMB Nick Ball ha llevado uno de los calendarios más activos en el boxeo de élite.

En marzo de 2024, Ball tuvo que conformarse con un empate polémico y desafortunado ante el monarca del CMB, Rey Vargas, en Arabia Saudita. Tres meses después regresó a Riad y arrebató el cinturón de la AMB al estadounidense Raymond Ford.

En lugar de dormirse en los laureles, Ball trabajó duro para consolidar su posición en lo más alto de las 126 libras, sumando victorias sólidas sobre el excampeón supergallo T.J. Doheny y Ronny Ríos.

El mes pasado, el púgil de Liverpool realizó la tercera defensa exitosa de su título al imponerse por puntos a Sam Goodman.

Su entrenador, Paul Stevenson, ya está de vuelta en su gimnasio Everton Red Triangle preparando a su establo de boxeadores para un cierre cargado de 2025. Ball, por su parte, disfruta de un merecido descanso.

«Probablemente volverá después de Navidad, en febrero, diría yo», comentó Stevenson a The Ring.

«Ha tenido cinco peleas de título mundial en un año. Por un lado, quieres maximizar tu juventud y tu prime, pero también hay que tener cuidado de no quemarse. Un buen descanso le vendrá bien. Tendrá una bonita Navidad, ha tenido un gran año y volverá fresco en febrero».

Goodman le dio un buen examen a Ball. El australiano se movió bien, usó su jab y mostró corazón, lo que complicó al campeón. Ball admitió no haber estado en su mejor versión, pero tiró de experiencia, manejó los asaltos con inteligencia y retuvo su título por decisión unánime amplia.

Stevenson quedó satisfecho con lo mostrado, dadas las circunstancias:

«A ese nivel rara vez pasas un campamento sin pequeñas lesiones o molestias. Incluso así, él siente que no fue su mejor actuación. Goodman hizo un buen trabajo para complicarlo», explicó.

«Sé que en la tele decían que estaba muy cerrado en puntos, pero aunque los asaltos fueran ajustados, yo sentía que estábamos ganando la mayoría. En la esquina le decía: “Tenemos que estar arriba con claridad”».

Goodman, invicto y con buenas credenciales, estuvo cerca de pelear con el campeón indiscutido supergallo y monarca de The Ring, Naoya Inoue, a finales del año pasado. Que Ball fuera tan favorito frente a él refleja lo mucho que ha progresado en poco tiempo.

Las peleas de alto nivel contra Vargas y Ford llegaron tras una victoria de calidad frente al excampeón Isaac Dogboe. Sus defensas ante Ríos, Doheny y Goodman le han dado al británico de 28 años margen para mejorar y asegurar su futuro económico. Pero Stevenson quiere verlo de nuevo en la cima.

Por un tiempo se especuló con recibir a Inoue en el peso pluma, pero parece que el japonés seguirá en las 122 libras. Aun así, las opciones son atractivas.

«Personalmente, me gustaría la pelea con Angelo Leo, una unificación», dijo Stevenson.

«Sería genial, justo lo que necesita: otro gran desafío. Una gran pelea para cimentar su legado, porque mucha gente se queja del nivel de oposición. Pero compáralo con los otros campeones pluma. Mira BoxRec: [el campeón FIB] Angelo Leo ha hecho una defensa. [El monarca OMB] Rafael Espinoza ha tenido tres. Rivales muy flojos. Nick ha estado muy activo, manteniéndose ocupado y sólido.

Obviamente, Inoue está en otras cosas ahora. Lo esperábamos, pero no es el fin del mundo. Hay otras peleas ahí fuera, así que una unificación sería perfecta para Nick».