Es difícil mantener el enfoque en Thomas LaManna cuando toda la atención está en Caleb Plant.

Subestimar a un oponente puede conducir a la derrota o al menos a una mala actuación, por lo que Jermall Charlo sigue concentrado en su enfrentamiento del sábado por la noche en el Michelob Ultra Arena en Las Vegas, Nevada. Pero aunque no subestima al contendiente de segundo nivel, sí lo ve como un paso para algo más grande.

Si Charlo vence a LaManna y Plant hace su parte frente a Jose Armando Reséndiz en el combate principal a 10 asaltos, ambos buscarán finalmente resolver sus diferencias más adelante este año. Decir que tienen asuntos pendientes es quedarse corto.

En el pesaje de Terence Crawford vs. Errol Spence en julio de 2023, Charlo y Plant discutieron entre bastidores, y el comportamiento de Charlo fue visto como una falta de respeto por parte de Plant. Eso llevó a que Plant le diera una bofetada en la cara, y los titulares del fin de semana se escribieron solos.

El oriundo de Houston no se abalanzó sobre Plant, sino que negó con la cabeza y se alejó tranquilamente mientras la seguridad los separaba. Dos años después, sin embargo, se enfurece al recordar aquella noche. No puede borrar esa memoria, pero puede crear una nueva venciendo a Plant en el ring.

Si se enfrentan, Charlo planea adoptar un enfoque agresivo con presión desde el inicio. El boxeador de 35 años sabe que Plant lo golpeará, y aunque la bofetada no deseada sigue presente en su memoria, usará ese recuerdo para medir su poder —o su aparente falta de él.

“Me sorprendió, pero no me tumbó,” dijo Charlo a un grupo de reporteros. “No pega duro. No creo que Caleb Plant sea un noqueador de un solo golpe. Yo sí he demostrado eso. Él es un boxeador, un boxeador escurridizo.”

Algunos de los rivales anteriores de Plant, especialmente Anthony Dirrell, no estarían de acuerdo con Charlo. El excampeón mundial supermediano de la FIB ha mandado a muchos a la lona y hará todo lo posible por continuar con esa tendencia.

Actualmente, pocos están tan encendidos como el boxeador de 32 años. Pero aunque claramente está en forma y es difícil de vencer, Charlo no puede esperar para tener la oportunidad de poner a prueba sus habilidades contra él.

“Caleb Plant y yo vamos a pelear después.”