Momentos después de anunciarse oficialmente la exhibición del 14 de noviembre entre Jake Paul y Gervonta Davis, el influencer convertido en boxeador agarró su megáfono y lanzó los primeros dardos en redes sociales.

“Tamaño contra velocidad, poder contra precisión – uno se alzará y el otro caerá”, dijo Paul, quien como peso crucero está siete divisiones por encima de su rival ligero. Con 1,85 m (6’1’’), Paul también tendrá una ventaja de 19 cm en estatura y 24 cm en alcance frente al diminuto Davis.

“Gervonta ha estado faltando el respeto a mi nombre por demasiado tiempo. Su apodo puede ser ‘Tank’, pero yo soy un dron FPV, y estoy a punto de desactivar al pequeño. Sí, es uno de los mejores libra por libra del mundo, pero mi lema es: cualquiera, en cualquier momento, en cualquier lugar y contra todas las probabilidades. Y me gustan mis probabilidades”.

Después, Paul publicó una foto de una caja de pañuelos con el comentario: “suministrando estos para mi timeline de Twitter ahora mismo”. También subió una imagen editada de Davis al lado de un pastel de bodas con la frase: “más o menos del mismo tamaño”.

Otros posts incluyeron canciones de 50 Cent como “Straight to the Bank” y “If I Can’t”, en lo que pareció ser un troleo a detractores, recordándoles que una vez más consiguió un oponente de renombre mientras genera millones en el proceso.

El baile entre Davis, de 30 años, y Paul, de 28, llega casi un año después de que Paul enfrentara a un Mike Tyson de 58 años, un ícono de los pesos pesados que evidenció tener sus mejores días detrás. Aquella pelea, con guantes de 14 onzas y rounds de dos minutos, fue sancionada como combate profesional a ocho asaltos.

Tras vencer por decisión unánime a Julio César Chávez Jr. en junio, Paul intentó cerrar un acuerdo para enfrentar a Anthony Joshua, pero el duelo nunca se concretó. El miércoles, sin embargo, sugirió que aún podría suceder en el futuro:

“Primero voy a matar a David, luego iré a masacrar a Goliat”, declaró.

Paul y Davis se enfrentarán en el State Farm Arena de Atlanta, en un evento transmitido por Netflix. Most Valuable Promotions, la compañía de Paul, no reveló cómo manejará la enorme diferencia de peso, el número de asaltos o las reglas bajo las cuales intercambiarán golpes.

Lo único seguro es que, en unos tres meses, el circo se mezclará con el boxeo.