Harlem Eubank apuntará nuevamente al nivel mundial después de superar de forma contundente al canadiense Josh Wagner.

Tras 10 asaltos completamente unilaterales, el peso welter británico se llevó una decisión unánime amplia. Las tarjetas fueron 99-91 y 100-90 en dos ocasiones.

Eubank (22-1, 9 KOs) dio el salto a la élite por primera vez en julio pasado, pero un feo choque de cabezas puso fin prematuro a su enredado combate con Jack Catterall.

La pelea nunca llegó a prender. Catterall sufrió un corte espantoso pero, al menos, logró marcharse con una decisión técnica. El fin de semana pasado, detuvo a Ekow Essuman en la cartelera de la enorme revancha entre Conor Benn y el primo de Harlem, Chris Eubank Jr., en el Tottenham Hotspur Stadium de Londres.

Harlem Eubank tendrá que ganarse otra oportunidad al más alto nivel, y comenzó su reconstrucción regresando a casa, al Brighton Centre, donde navegó sin problemas hacia la victoria contra un decepcionante Wagner (19-2, 10 KOs).

Wagner, con 146.8 libras, sonreía durante el primer asalto, pero aunque era claramente el hombre más grande, Eubank —146.5 libras— era mucho más rápido.

En lugar de abrirse y dejar huecos, Wagner dosificó sus ataques. Conectó una buena derecha en el primero y un gancho de izquierda en el segundo, pero le costó golpear de manera consistente al siempre móvil Eubank, quien entraba y salía con velocidad, punzaba al cuerpo con el jab y soltaba de vez en cuando alguna derecha.

La sonrisa desapareció del rostro ensangrentado de Wagner en el cuarto asalto. Un confiado Eubank ya había encontrado su ritmo y su tiempo.

Plantado justo frente a él, Eubank utilizó amagos y juego de pies para impedir que Wagner lanzara más que golpes sueltos, mientras su jab funcionaba como un arma rápida y precisa que preparaba la derecha por encima.

Wagner trató brevemente de cambiar el rumbo en el sexto, pero fue rápido devuelto a su sitio.

Consciente de que una gran oportunidad se le escapaba, Wagner subió por fin el ritmo en el octavo, aunque terminó perdiendo los intercambios y una sólida derecha de Eubank pareció drenar cualquier entusiasmo restante.

Aunque dominaba por completo, Eubank eligió no correr riesgos innecesarios. Siguió jabeando, amagando y conectando derechas en lo alto, mientras un Wagner desmoralizado esperaba que sonara la campana final.

Lucas Roehrig inauguró la transmisión televisiva con una victoria por decisión en ocho asaltos sobre Brice Clavier.

Entrenado y manejado por el excampeón mundial supermediano de la AMB, George Groves, el peso crucero londinense de 22 años tuvo las manos llenas desde el primer campanazo.

Cayó a la lona por un gancho de izquierda en el asalto inicial, apenas un instante después de que el árbitro ordenara separarse, y fue alcanzado repetidamente por el rudo —pero ambicioso— púgil francés.

Roehrig (7-0, 3 KOs) fue acreditado con un derribo en el segundo episodio cuando empujó a Clavier (13-7-1, 7 KOs) tras un gancho de izquierda propio, pero anotó una caída más clara en el cuarto, cuando castigó a Clavier con un golpe corto al cuerpo.

Aunque Roehrig logró controlar parcialmente el combate, terminó con un corte sobre el ojo izquierdo y perdió un punto en el último asalto por un golpe bajo.

El árbitro anotó 78-72 a favor de Roehrig, aunque la holgura en las tarjetas no refleja lo duro que tuvo que trabajar para llevarse la victoria.