Floyd Schofield siempre ha tenido confianza en sí mismo, pero ahora, a sus 22 años, su convicción está por las nubes tras superar una situación límite y silenciar a sus críticos de forma contundente.
Muchos cuestionaron su temple cuando se retiró durante la semana de pelea antes de su combate por el título mundial del CMB ante
Shakur Stevenson en Riad, Arabia Saudita.
Hasta el día de hoy, no se ha esclarecido del todo por qué se desmoronó aquel compromiso.
Sin embargo, el pasado 28 de junio, Schofield (19-0, 13 KOs) dejó claro que no está para juegos. Despachó rápidamente al excampeón mundial Tevin Farmer —quien venía de una serie de dos combates ante
William Zepeda— anulando por completo su defensa técnica y estilo esquivo. Schofield lo derribó dos veces antes de detenerlo
en un torbellino de primer asalto en el Honda Center de Anaheim, California.
Llamarlo el “mandamás” de la división ligera sería exagerado, pero su nombre ya empieza a hacer ruido. No podrá elegir con total libertad a sus próximos rivales, pero si dependiera de él, apunta directamente a los campeones.
“Si pudiera pelear contra Tank
[Gervonta Davis], Shakur [Stevenson] y
[Raymond] Muratalla uno tras otro, mejor aún,” declaró Schofield en el programa Cigar Talk con Naji.
El llamado de Schofield podría generar atención, aunque esos combates hoy no parecen viables. Davis está encaminado
a una revancha con Lamont Roach el 16 de agosto; Stevenson enfrentará a Zepeda este fin de semana en la cartelera de respaldo de Ring III en Nueva York; mientras que
Muratalla está, según informes, en negociaciones para enfrentar al contendiente número 1 del ranking FIB, Andy Cruz.
Aun así, Schofield tiene algo a su favor: el tiempo. Aunque no le entusiasma esperar, es lo suficientemente joven como para mantenerse activo mientras le llega su momento. Muchos de su edad prefieren el camino lento y seguro. Schofield, en cambio, considera que eso no lo llevará a donde quiere estar. Tiene claro que deberá tomar más riesgos si quiere dejar una marca imborrable.
“Estoy persiguiendo la grandeza,” sentenció Schofield. “No estoy aquí para perder el tiempo.”