Edgar Berlanga no se sorprende con facilidad, pero el 31 de mayo no podía creer lo que veía.
Esa noche,
Caleb Plant vivió una de las peleas más duras de su carrera, cayendo sorpresivamente
por decisión unánime ante José Reséndiz tras 12 asaltos en el evento estelar transmitido por Prime Video desde el Michelob Ultra Arena, en Las Vegas, Nevada.
Reséndiz, residente de California, llegaba como claro underdog al corazón del boxeo mundial, pero tras sonar la campana final, no hubo dudas: entre los excompañeros de sparring, solo uno salió vencedor.
Durante años se especuló con un posible enfrentamiento entre Berlanga y Plant, pero tras las derrotas sufridas por ambos en el último año, el interés mediático se ha enfriado de forma natural.
No obstante, aunque hay señales claras de un declive físico en Plant —más lento, menos escurridizo en defensa— Berlanga (23-1, 18 KOs) no cree que esa pelea esté completamente descartada. A sus 28 años, el neoyorquino aún recuerda cada palabra despectiva que Plant lanzó en su contra, y por ello mantiene el deseo de enfrentarlo.
“Todavía quiero pelear con él,” confesó Berlanga a Fight Hub TV. “Sigue siendo un nombre relevante en el boxeo. Todavía quiero partirle la cara. Todo lo que habló… todavía quiero darle su merecido.”
Antes de que puedan resolver sus diferencias dentro del ring, ambos tienen compromisos inmediatos. Berlanga recibirá esta noche al invicto británico
Hamzah Sheeraz en la división supermediana, como combate estelar del evento Ring III, en el Louis Armstrong Stadium, en Queens, Nueva York.
Confía plenamente en hacer su trabajo, y luego espera que Plant (23-3, 14 KOs) haga lo propio para mantener con vida una futura pelea entre ambos.
“Obviamente tiene que hacer esa revancha, ganarle a ese tipo [Reséndiz] y verse bien haciéndolo, pero yo no tengo problema en darle la pelea.”