NUEVA YORK — Una cosa que a Edgar Berlanga le encanta es una gran pelea.

Pero enfrentamientos con Jermall Charlo, Caleb Plant o Canelo Álvarez tienen poco o ningún sentido después de su última presentación.

El nativo de Brooklyn fue brutalmente detenido en el quinto asalto por Hamzah Sheeraz en su ciudad natal el 12 de julio en el Louis Armstrong Stadium de Flushing, Nueva York. Reafirmarse en la división del peso supermediano es fundamental, pero Berlanga necesita volver a la columna de las victorias.

Por todas las cuentas, está trabajando en ello.

“Estoy enfocado en mi pelea de regreso en este momento”, dijo Berlanga a The Ring. “Hay muchas peleas grandes y muchos nombres importantes para mí en el futuro, pero ahora mismo tengo que volver a encaminarme.”

Berlanga, de 28 años, no dejó claro cuándo volvería, pero dijo que se están discutiendo varias fechas y nombres.

Antes de seguir oficialmente adelante, Berlanga (23-2, 18 nocauts) tuvo que hacer las paces con su dura noche contra el inglés Sheeraz (22-0-1, 18 nocauts).

Durante la preparación, el exuberante neoyorquino advirtió al alto y delgado contendiente. Pero cayó dos veces en el cuarto asalto, seguido de un violento desenlace en el siguiente round.

Aunque una revancha con Sheeraz no ocurrirá pronto, si es que sucede alguna vez, Berlanga buscará desahogar su frustración con su próximo oponente.

“Lo que pasó en mi última pelea ya es cosa del pasado”, dijo Berlanga. “No fue mi noche, pero eso no apagó mi luz ni dañó mi poder estelar. Fue una mala noche, pero sucede. Voy a dar un ejemplo con mi próximo oponente. Te lo prometo.”