Llamar amigo a Dillian Whyte probablemente sería un poco hiperbólico para Derek Chisora.

Eso no significa que Chisora le desee mal.

Cuando se anunció que su antiguo rival aceptó una pelea con Moses Itauma, Chisora no entendió el sentido. Con una diferencia de edad de 17 años entre ambos, Chisora lo vio como una situación de perder-perder para Whyte.

Aun así, el boxeador de 37 años no prestó atención a las advertencias de Chisora. En retrospectiva, quizá debería haberlo hecho.

La potencia, la velocidad, los ángulos: todo fue demasiado, ya que Whyte (31-4, 21 nocauts) fue derribado y detenido en el primer asalto la noche del sábado en la ANB Arena en Riad, Arabia Saudita.

Chisora, quien se quedó corto contra Whyte en dos ocasiones distintas, no podía creer lo que estaba viendo. Aunque nunca fueron del todo cercanos, no quería que las cosas terminaran de esa manera.

“Simplemente me entristece que Dillian tuviera que salir así”, dijo Chisora a The Ring inmediatamente después.

El futuro de Whyte ahora es más incierto que nunca. El de Itauma, sin embargo, es tan brillante como se pueda imaginar.

El contendiente de 20 años está clasificado entre los 12 primeros por cada uno de los cuatro organismos de sanción, incluido el número 1 por la OMB. A pesar de su edad, Itauma ya está siendo mencionado como un oponente realista para el campeón indiscutido de los pesos pesados Oleksandr Usyk.

Su equipo, sin embargo, ha planteado la idea de enfrentar rivales menos imponentes.

Sea lo que sea que Itauma (13-0, 11 nocauts) decida hacer, Chisora lo observará desde la barrera.

En cuanto a Whyte, podría decidir volver a pelear. El veterano ha acumulado el tipo de crédito para hacer lo que le plazca. Ya sea que decida retirarse o continuar, los recuerdos imborrables de él tendido sobre la lona han quedado grabados en la mente de Chisora.

“Fue bastante triste de ver”, dijo Chisora. “Estaba muy triste.”