Dave Allen ha dejado abierta la posibilidad de bajar de división después de admitir que
Arslanbek Makhmudov fue simplemente demasiado grande y demasiado bueno para él la noche del sábado en Sheffield.
Allen (24-8-2, 19 KOs) mostró valentía frente al ruso de 1,98 metros (6 pies 6 pulgadas) y logró completar los 12 asaltos de lo
que terminó siendo una pelea brutal en la Sheffield Arena.
Aun con las dos deducciones de puntos que sufrió Makhmudov por agarres excesivos, el visitante se impuso claramente en las tres tarjetas de los jueces.
Como ocurre a menudo, el británico de 1,93 metros (6 pies 4 pulgadas) cedió ventaja en altura y alcance, y ahora ha sugerido que podría rendir mejor compitiendo en una categoría inferior: la división de “bridgerweight” (224 libras / 16 stone), una clase de peso que The Ring no reconoce oficialmente.
Por ahora, solo el WBC y la WBA la contemplan, con
Kevin Lerena (WBC) y Muslim Gadzhimagomedov (WBA) como campeones actuales.
“Sí, las 16 stone (224 libras) son una posibilidad”,
escribió Allen en su cuenta de Instagram.
“Sí, sería un trabajo duro y sí, tendría que marcar el peso.
Pero, como todos los boxeadores en cualquier división que deben dar el peso, sería difícil y algo nuevo para mí.
Sería complicado, pero definitivamente está sobre la mesa.”
Allen marcó 259 libras para su combate con Makhmudov (21-2, 19 KOs), mientras que el peso más bajo de su carrera —disputada exclusivamente en el peso pesado— fue de 232 libras, registro que tuvo en su debut en diciembre de 2012 y nuevamente en su sexta pelea año y medio después.
Esto significa que cualquier movimiento hacia abajo requeriría una pérdida de 35 libras.
Independientemente de la categoría que elija para su próxima pelea, Allen reveló que ya se ha puesto en contacto con su promotor Eddie Hearn para concretar un posible combate antes de fin de año, a pesar de haber considerado brevemente el retiro.
“Después de la pelea pensé: ‘quizás ya está, hasta aquí llegué’,
pero le escribí a Eddie hace diez minutos diciéndole: ‘pongamos algo antes de que acabe el año.’
Loco, ¿verdad? Es un juego difícil de dejar.
Estoy adolorido ahora, no soy el mejor boxeador, pero me gusta.
Me gusta competir, lo amo, y lo haría todos los días si pudiera.”