Cuando Daniel Dubois y Oleksandr Usyk se vieron cara a cara en el centro del estadio de Wembley en Londres, recientemente, un prolongado cara a cara ofreció a fotógrafos y cámaras material perfecto para promocionar su próximo combate por el título indiscutido de los pesos pesados.

Ese momento también le dio a Dubois la oportunidad perfecta para marcar el tono de cara al combate del 19 de julio.

Dubois (22-2, 21 KOs), campeón de la FIB, sostuvo la mirada de Usyk y luego empujó con firmeza al monarca unificado del CMB, AMB, FIB y The Ring en el pecho.

Si cualquier otro boxeador hubiera hecho algo similar, se habría considerado un acto más de promoción previa al combate. Pero desde que fue derrotado por Usyk (23-0, 14 KOs) en agosto de 2023, Dubois ha hecho de su presencia e intensidad una parte clave de su estrategia previa a cada pelea.

El londinense, que solía ser reservado y poco dado a declaraciones, rompió con su carácter cuando, antes de enfrentar a Jarrell “Big Baby” Miller en diciembre de 2023, le dijo abiertamente que lo “golpearía como si fuera su padre”. Dubois cumplió su palabra y detuvo a Miller en el décimo y último asalto.

También se ganó la atención de Filip Hrgović al insultarlo duramente durante una mesa redonda, para luego dominarlo y noquearlo en el octavo asalto.

El año pasado, Dubois no retrocedió ni un paso cuando Anthony Joshua, dos veces campeón unificado, intentó imponerse durante la previa de su combate por el título de la FIB en Wembley. En septiembre, Dubois noqueó a Joshua en el quinto asalto de una pelea dramática.

Dubois insiste en que el empujón a Usyk fue más un gesto espontáneo que una maniobra calculada de intimidación.

“Fue algo juguetón”, dijo entre risas en una entrevista con Queensberry. “No fue gran cosa. Son cosas que pasan en el boxeo, especialmente en peleas grandes como esta donde hay tanto en juego. Estoy entusiasmado.

“Creo que en mis últimas tres peleas he demostrado que soy totalmente diferente. Estoy más seguro de mí mismo. Confío y creo más en lo que soy capaz de hacer. Estoy listo, verdaderamente listo para esto.”

El golpe bajo que dejó a Usyk en la lona en el quinto asalto de su primer combate ha sido el centro del debate previo a la revancha, aunque ha eclipsado el hecho de que Usyk controló la pelea antes y después de ese incidente, rompiendo física y mentalmente a Dubois, hasta que este se arrodilló en el noveno asalto.

Dubois puede haber elevado su nivel desde aquel combate, pero Usyk no ha disminuido su rendimiento. Aunque ha estado menos activo que Dubois, el ucraniano se ha consolidado como el mejor peso pesado de su generación.

En mayo de 2024 venció a Tyson Fury para convertirse en el primer campeón indiscutido de los pesos pesados en el siglo XXI, y repitió la victoria en la revancha de diciembre.

Dubois aprendió mucho al compartir el ring con Usyk, y ahora afrontará la revancha con la confianza de un campeón. Aun así, necesitará mucho más que fe en sí mismo y potencia para superar los problemas técnicos que enfrentó en el primer combate.

Dubois ha encontrado el equilibrio entre confianza y realismo, y acepta que vencer a Usyk para coronarse campeón indiscutido será el mayor desafío de su carrera.

“Creo que es el mejor boxeador al que me he enfrentado. Su récord habla por sí solo, es un tipo de primerísimo nivel”, afirmó.

“No se le puede quitar nada, pero en este nivel, todos son buenos. Solo tengo que estar en mi mejor versión. Enfocado, preparado… y simplemente pasaré por encima de él. Voy a hacer el trabajo.”