El campeón mundial IBF del peso superwélter Bakhram Murtazaliev habría querido enfrentarse a Terence Crawford. Y cree que el monarca WBA lo habría hecho en un combate de unificación si no hubiera surgido la oportunidad contra Canelo Álvarez.

Por el momento, Murtazaliev será un espectador interesado cuando Crawford (41-0, 31 KOs) suba dos divisiones para retar al campeón indiscutido del peso supermediano Álvarez (63-2-2, 39 KOs) el próximo 13 de septiembre en el Allegiant Stadium de Las Vegas, en un evento transmitido por Netflix.

“Es realmente una pelea 50-50”, dijo Murtazaliev a The Ring. “Creo que Crawford puede vencer a Canelo por decisión si no recibe ningún golpe fuerte. Si Canelo lo conecta temprano, entonces será otra historia. Canelo tiene mucho poder, y no solo para su división, sino para todas en las que ha peleado.”

Murtazaliev (23-0, 17 KOs) sabe muy bien lo que significa moverse entre categorías y competir en distintas divisiones. Comenzó su carrera en las 168 libras, también peleó en las 160, antes de establecerse en las 154. En medio de todo eso, el púgil de 32 años, oriundo de Grozni (Rusia), hizo sparring con campeones semipesados como Sergey Kovalev y Oleksandr Gvozdyk.

“Tenía una ventaja al guantear con tipos más grandes porque era más rápido y me movía mejor, pero claro que sientes la pegada”, explicó Murtazaliev. “Hay una razón por la que existen las categorías de peso. El cerebro es algo sensible, y cada libra extra que carga el oponente es más daño que el cerebro tiene que absorber. Sé lo que se siente.”

Por desgracia para Murtazaliev, también sabe lo que es no pelear.

Le ha resultado muy difícil encontrar rivales dispuestos desde que demolió a Tim Tszyu con cuatro caídas y un nocaut técnico en el tercer asalto en octubre.

Estaba previsto que enfrentara al retador obligatorio Erickson Lubin, y en agosto se ordenó una subasta de bolsas, pero Lubin optó por pelear contra Vergil Ortiz Jr. en su lugar. Ahora Murtazaliev se encamina hacia otra pelea ordenada por la IBF contra Josh Kelly.