Horas antes de que Saúl "Canelo" Álvarez hiciera su debut en Arabia Saudita en el ANB Arena, Amir Khan descansaba en la terraza de un bar de jugos, a unos 15 kilómetros del estadio. Mientras ventiladores gigantes y rocío frío ayudaban a sobrellevar los 40 grados de temperatura, el excampeón británico reflexionaba sobre su propio enfrentamiento con el mexicano, hace ya nueve años.

“Ni siquiera recuerdo que me golpeara”, confesó Khan. “Estaba noqueado antes de tocar la lona. Fue el mejor golpe que me han dado en mi carrera.”

El golpe al que se refiere es el devastador derechazo que Canelo conectó a unos 20 segundos del final del sexto asalto, el 7 de mayo de 2016. Khan, que había subido desde peso wélter hasta mediano para disputar el título mundial del CMB, había tenido buenos momentos hasta entonces; de hecho, un juez lo tenía 48-47 arriba tras cinco asaltos.

Pero Canelo había estado preparando una trampa. Tras castigar el cuerpo de Khan con jabs, fingió otro ataque abajo y obligó al británico a bajar la guardia. Ese fue el momento en que conectó el golpe limpio al mentón. Posiblemente, uno de los nocauts más espectaculares de la carrera del mexicano.

“Recuerdo que Virgil Hunter [su entrenador] me decía: ‘No plantes los pies’. Y lo hice por un segundo. Él fingió al cuerpo y me detuve para defenderme.

Ese golpe fue tan preciso... En cierto modo, agradezco que haya sido solo uno. No recibí castigo prolongado, fue un solo impacto. Como un accidente de auto. Un solo golpe y todo terminó.”

Unas horas más tarde, Canelo no lució como aquel destructor. En un combate aburrido, venció por decisión unánime al escurridizo William Scull en una pelea de 12 asaltos que rompió un récord negativo: apenas 445 golpes lanzados entre ambos. Un desastre para cualquier promotor, y una advertencia para Khan, quien ahora busca triunfar desde ese rol.

Khan, de 38 años, no pelea desde febrero de 2022, cuando fue detenido en el sexto asalto por Kell Brook, su eterno rival doméstico. Aunque durante estos años se habló de un posible regreso, Khan descarta volver al ring.

“Ahora voy por el lado promocional”, afirma.

“Contra Brook ya no tenía ese fuego en el estómago. Cuando salí del vestuario solo pensaba en que en una hora estaría de vuelta en el hotel. Ya no tenía ese deseo de guerra.”

Sin embargo, el ex campeón unificado del peso superligero volverá al boxeo en junio, esta vez como promotor. Su primera cartelera internacional será el 13 de junio en Ghana, bajo el nombre Battle of the Beasts. La velada estará encabezada por un duelo entre el excampeón mundial crucero Andrew Tabiti y el púgil local Jacob Dickson. También estará presente el londinense Ohara Davies, quien enfrentará al tanzano Mohammed Aliseni.

Khan ve este debut como una oportunidad para aprender y lanzarse más adelante en mercados como Reino Unido y Estados Unidos, donde vivió sus mejores noches.

“No creo que cometa errores, pero siempre me preparo para lo peor. Ghana será mi campo de aprendizaje.

Amo el boxeo y esta es una manera de seguir involucrado. He visto todo lo que se necesita para montar un evento. Pero sobre todo, quiero ayudar a los jóvenes de la forma correcta.”

Khan se inspira en figuras como Oscar De La Hoya y espera llevar su promotora, AK Promotions, a ese nivel. Confía en su equipo y en su reputación para hacer crecer el proyecto.

“Quiero mostrarles a las plataformas lo buenos que pueden ser nuestros eventos. Y de ahí, crecer.”

Tras ganar la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 con solo 17 años, Khan firmó con Frank Warren, con quien tuvo 19 peleas y una sola derrota. A pesar de haber trabajado con promotores como Eddie Hearn, Golden Boy, Bob Arum y Ben Shalom, guarda un cariño especial por Warren.

“Frank era muy bueno en lo que hacía. Fue un gran promotor y un gran ‘matchmaker’. Siempre mantuve contacto con todos ellos.

Pero ahora quiero ver si me devuelven ese apoyo. Les generé millones como boxeador. Ahora quiero una mano como promotor. Aún estoy aprendiendo.”

Aunque el camino será nuevo, Khan apunta alto. No solo quiere promover peleas, quiere construir campeones desde cero.

“Quiero codearme con los grandes promotores. Quiero guiar a un peleador desde sus inicios hasta un título mundial.

Si voy a hacerlo, lo haré al 100%. Quiero llegar lo más alto posible. Si eso significa ganar títulos, unificar, ser indiscutido, eso es lo que quiero.

Soy ese tipo de persona: quiero tomar el control de este deporte.”