A Michael Hunter no le gusta perder el tiempo. Y el contendiente de peso pesado de 37 años siente que lo han estado tomando a juego.

Durante las últimas semanas, Hunter (24-1-2, 17 KOs) estaba bajo la impresión de que su enfrentamiento contra Jarrell Miller estaba firmado, sellado y confirmado para Las Vegas, Nevada, el 11 de septiembre… hasta que no lo estuvo.

Ambos bandos se señalaron mutuamente, pero Hunter ya aceptó que no se medirá al lenguaraz neoyorquino. El problema es que ahora no tiene ni rival ni fecha.

Hunter no quiere quedarse en el banquillo más tiempo del necesario, ni tampoco hacer de casamentero. Pero sí tiene un nombre en mente.

“Creo que Agit Kabayel sería una buena pelea”, dijo Hunter a Chris Mannix en su canal de YouTube. “Creo que es una muy buena pelea”.

Kabayel (26-0, 18 KOs) no es de los que rechazan un reto, pero antes de considerar a Hunter, o a cualquier otro, prefiere esperar.

Gracias a su victoria sobre Zhilei Zhang el pasado 22 de febrero en la ANB Arena de Riad, Arabia Saudita, se colocó en una posición ideal. No solo su nocaut en el sexto asalto fue probablemente el triunfo más grande de su carrera, sino que además le aseguró el título interino del CMB.

Tenerlo en su poder es un buen comienzo, pero en última instancia lo que Kabayel realmente quiere es el lugar de Oleksandr Usyk.

El actual campeón indiscutido de los pesos pesados es el objetivo número uno del alemán, aunque eso no significa que reciba la llamada.

Antes de detener a Zhang, Kabayel ya había impresionado en sus presentaciones consecutivas contra Arslanbek Makhmudov y Frank Sánchez, frenando en seco a ambos.

“Temible” sería una buena manera de describir a Kabayel y su estilo de combate agresivo. Pero mientras algunos podrían apartarse de él, su reputación atrae aún más a Hunter.

“Él está en ese lado de ‘hombre del saco’”, continuó Hunter. “Y esos son los tipos a los que me gusta enfrentar”.