Anthony Yarde mostró una figura desolada tras quedarse corto en su tercer intento mundialista en Riad, Arabia Saudita, el sábado por la noche.

Yarde (27-4, 24 KOs) fue detenido en el séptimo asalto de su pelea con el campeón mundial del peso semipesado del CMB, David Benavidez, en el combate estelar de una cartelera cargada de acción en Ring IV.

El londinense exhibió su habitual ambición y determinación, pero Benavidez —el número 2 del peso semipesado según The Ring— fue tomando un control cada vez más firme a medida que avanzaban los asaltos.

Finalmente, en el séptimo episodio, Yarde cayó a la lona tras recibir una dura andanada de golpes.

Benavidez (31-0, 25 KOs) recibió una deducción de dos puntos por golpear a un Yarde ensangrentado después de que este pusiera la rodilla en el suelo, pero, para entonces, el desenlace ya estaba escrito.

Instantes después, Yarde volvió a encontrarse bajo un fuego intenso y el árbitro Héctor Afu decidió intervenir para detener la acción.

En agosto de 2019, Yarde viajó a Rusia para enfrentarse al temido Sergey Kovalev y realizó una actuación admirable antes de ser detenido en el undécimo asalto, en un intento por conquistar el título de la OMB que poseía Kovalev.

En enero de 2023, él y el entonces campeón unificado, Artur Beterbiev, protagonizaron un choque violento antes de que el ritmo implacable del ruso y sus golpes pesados hicieran mella, obligando a su esquina a detener la pelea en el octavo asalto.

En ambos desafíos previos, Yarde tuvo momentos de éxito genuino, pero aunque logró conectar alguna que otra derecha limpia contra Benavidez, el invicto peleador de 28 años nunca le permitió asentarse realmente en el combate.

“Él está en el top tres”, dijo Yarde a The Ring mientras evaluaba dónde ubicar a Benavidez entre los rivales que ha enfrentado.

“Son tiempos distintos. Cuando peleé con Kovalev, yo estaba muy verde. Creo que lo pondría segundo o tercero, lo pondría por encima de Kovalev.

Creo que está entre él y Beterbiev, y luego diría Kovalev”.

Yarde —que llegó al combate como el número 4 del ranking del peso semipesado de The Ring— tiene ahora 34 años y deberá reflexionar seriamente sobre cuál será el siguiente paso de su carrera.

Su viejo rival, Joshua Buatsi, estaba en primera fila en Riad en una misión de observación.

Ambos han estado vinculados a una posible pelea desde hace tiempo, pero Buatsi —número 8 en las clasificaciones de The Ring en las 175 libras— recientemente superó con lo justo al altamente clasificado Zach Parker y podría ahora enfocarse en asegurar una oportunidad por el título mundial antes que enfrentarse a Yarde.

Yarde disfruta de las grandes noches y no es del tipo que retrocede al nivel doméstico para convertirse en objetivo de prospectos en ascenso. Tampoco es el tipo de hombre que renuncia a su sueño de convertirse finalmente en campeón mundial.

“Soy realista”, afirmó. “Sí, estoy destrozado por no haber logrado la victoria porque cuando ganas una pelea como esta, tu vida cambia para siempre. Pero viniendo de donde vengo, ya he cambiado mi vida para siempre. Soy muy ambicioso, siempre quiero lo mejor para mí, pero, de nuevo, esto es boxeo. Solo hay tres resultados posibles: yo gano, él gana o es un empate.

Él fue el mejor hombre esta noche. No le quito nada y hay mucho respeto”.