El CMB despojó a Terence Crawford de su título del peso supermedio el miércoles por no pagar las tarifas del organismo sancionador tras su victoria por decisión unánime sobre Canelo Álvarez en septiembre.

En la 63.ª Convención Anual de Boxeo del CMB en Bangkok, Tailandia, el presidente del CMB, Mauricio Sulaimán, afirmó que Crawford debía casi 300.000 dólares en tarifas después de su superpelea en Las Vegas.

Horas después de que la noticia sacudiera al mundo del boxeo, Crawford acudió a las redes sociales y arremetió con todo contra Sulaimán y el organismo sancionador, con una diatriba llena de insultos.

«Vi que Mauricio tenía mucho que decir sobre que yo no le pagué 300.000 dólares, más otros 100.000 y pico por las tarifas de sanción. Y dijo que no me disculpé», declaró Crawford en un directo de Instagram.

«¿Quién ... te crees que soy? Chico, mejor dáte una ... bofetada. No voy a pagarte ni ... a ti. ¿De qué ... estás hablando? ¿Qué te hace mejor que cualquiera de los otros organismos? ¿Eh? Respóndeme eso. La AMB, la OMB y la FIB aceptaron lo que les di… pero tú. Tú, el CMB, crees que eres mejor que todos, ¿no? Tienes el cinturón verde, que no significa una ... El verdadero ... cinturón es el de The Ring, que es gratis.

«Puedes quedarte con el ... cinturón. Es un trofeo de todos modos. ¿Por qué ... tengo que pagarte cada vez que pongo un pie en el ... ring? No tiene sentido. Yo soy el ... que está arriesgando la vida, no tú. Tú deberías pagarme por llevar tu cinturón, si quieres la verdad.

«Me revienta que este tipo se suba a un avión, tenga una suite de hotel para él y sus amigos, salgan a comer a restaurantes de cinco estrellas y todo eso, y ¿adivinen quién tiene que pagarlo? Nosotros, los boxeadores. Estamos pagando para que ustedes vengan aquí a pasárselo de lujo. Todo eso sale de nuestro bolsillo. ¿Les parece bien? Es una locura, ¿no?, que tengamos que pagarles una tarifa de sanción como si fueran el gobierno y nos estuvieran cobrando impuestos.

«Luego dijo que supuestamente gané 50 millones de dólares en la pelea con Álvarez. No sabes cuánto gané. Una vez más, estás especulando. Así que escucha, Mauricio. Te lo agradezco, porque todo el mundo sabe que estabas con Canelo. Te molestó que yo venciera a Canelo. Está bien, pasa. Si fueras un verdadero aficionado del deporte, habrías dicho “felicidades” en lugar de tener esa mueca en la cara, todo enfadado y haciendo pucheros».

Tras su victoria por puntos sobre Álvarez, el CMB le otorgó a Crawford un anillo conmemorativo con 10 quilates de piedras incrustadas en oro amarillo y 8,5 quilates de diamantes blancos. Su valor superaba los 100.000 dólares.

El miércoles, Sulaimán explicó que redujo la tarifa tradicional de sanción del 3 % al 0,6 %, y que el 75 % de los fondos recaudados estaba destinado a causas de apoyo a boxeadores necesitados.

Sulaimán afirmó que múltiples mensajes enviados a Crawford y a su equipo sobre el asunto quedaron sin respuesta; esto terminó llevando al CMB a despojar a Crawford.

En un movimiento paralelo, el CMB ordenó una pelea entre el campeón interino Christian Mbilli y Hamzah Sheeraz por el título vacante de las 168 libras.

«Ellos tienen sistemas de clasificaciones, y hay boxeadores que son retadores obligatorios durante años, como David Benavídez —que lo fue en las 168 libras antes de subir de categoría el año pasado—. Nunca viste al CMB despojar a Canelo por Benavídez, que fue obligatorio como dos años. Pero ese es el favoritismo de ...», dijo Crawford.

«[Sulaimán] quiso hacerlo todo sobre él mismo. No importa: sigo siendo el campeón indiscutido, y sigo siendo el campeón de la división. ¿Sabes por qué? El único cinturón que se reconoce como el del campeón es el de The Ring, cariño. Ese es el cinturón número uno de la división, que está por encima de todos. Y adivina qué: el cinturón de 188.000 dólares de The Ring es gratis. ¿Qué te parece? Me pregunto cuánto cuesta tu cinturón. No veo ningún recibo en tu cinturón. Es una locura, tienen tantos impuestos sobre esos cinturones.

«Dices que estás del lado de los boxeadores, pero probablemente eres peor que los promotores. Pero bueno, te deseo lo mejor a ti y a tu organización.

«Sigo siendo el campeón. La historia ya está hecha. Soy una leyenda».