NUEVA YORK — Esta vez, Alberto Puello no recibió el visto bueno en las tarjetas.

El zurdo dominicano contragolpeó por momentos al artista del nocaut puertorriqueño Subriel Matías, asimiló bien su poder temido y pareció hacer lo suficiente para ganar por decisión en la cartelera previa al combate entre Edgar Berlanga y Hamzah Sheeraz en el estadio Louis Armstrong en Queens. Sin embargo, fue Matías quien ganó su combate de 12 asaltos por decisión mayoritaria.

Los jueces Ron McNair y Tony Paolillo dieron ganador a Matías por 115-113. El juez Frank Lombardi puntuó el combate igualado, 114-114.

Puello (25-1, 10 nocauts) perdió el campeonato del CMB de las 140 libras ante Matías (23-2, 22 nocauts), quien ganó por decisión por primera vez en 25 combates profesionales. Turki Alalshikh anunció en el ring, tras la victoria de Matías, que quiere que Matías enfrente al británico Dalton Smith (18-0, 13 nocauts), retador obligatorio del CMB, en la cartelera de pago por evento “The Ring IV” el 22 de noviembre en el ANB Arena en Riad, Arabia Saudita.

Matías, de 33 años, entró al combate del sábado por la noche clasificado sexto entre los contendientes de 140 libras de The Ring, cuatro puestos detrás de Puello, de 30 años, quien ocupaba el segundo lugar.

Las dos victorias anteriores de Puello llegaron por decisión dividida ante el español Sandor Martin y el estadounidense Gary Antuanne Russell. No tuvo la misma suerte el sábado por la noche ante Matías, quien se convirtió en campeón de 140 libras por segunda vez, casi 15 meses después de que el zurdo australiano Liam Paro lo sorprendiera para arrebatarle el título superligero de la FIB en Manatí, Puerto Rico.

El poder de Puello, o la falta del mismo, no fue suficiente para dañar a Matías, ni siquiera para detenerlo momentáneamente en su avance constante durante el combate. Aun así, sumó puntos al contragolpear de forma constante contra un oponente que no hizo muchos ajustes durante los 12 asaltos.

El duodécimo asalto reflejó muchos de los anteriores, con Matías avanzando pero sin conectar muchos golpes significativos.

Puello sorprendió a Matías con un uppercut de izquierda a los 20 segundos del undécimo asalto. Ese fue el golpe más llamativo de la segunda mitad del combate.

El árbitro Eric Dali advirtió a Puello por sujetar cuando quedaban unos 20 segundos del décimo asalto. Matías presionó un poco durante ese asalto y Puello mostró algunos signos de fatiga.

La derecha recta de Matías arrinconó a Puello contra las cuerdas a mitad del séptimo asalto. Sin embargo, Puello no estaba lastimado y siguió lanzando golpes a Matías mientras boxeaba en retroceso.

Un gancho de derecha de Puello obligó a Matías a reajustar su posición poco después de la mitad del sexto asalto. Matías reanudó su persecución implacable de Puello, quien fue abucheado por sujetar a Matías en ese mismo asalto.

Dali advirtió a Matías a los 25 segundos del sexto asalto por usar su antebrazo contra el cuello de Puello.

Los fanáticos comenzaron a impacientarse en el quinto asalto, cuando ninguno de los dos boxeadores conectó muchos golpes limpios.

Matías presionó nuevamente a Puello en el cuarto asalto. Sin embargo, Puello asimiló bien sus golpes y acumuló puntos a pesar de que sus impactos no afectaron a Matías.

Un decidido Matías golpeó a Puello con golpes cortos mientras avanzaba en el tercer asalto, pero los golpes de Puello eran más vistosos desde la distancia. No obstante, Matías arrinconó a Puello contra las cuerdas al final del tercer asalto y lo alcanzó con un gancho de izquierda.

Puello siguió conectando golpes mientras retrocedía durante el segundo asalto.

Puello golpeó a Matías con un gancho de derecha después de que sonó la campana para finalizar el primer asalto. Esa falta provocó una severa advertencia por parte de Dali.

Puello estableció cierta distancia y conectó varios golpes efectivos mientras boxeaba en retroceso durante el primer asalto. Un uppercut de izquierda de Puello impactó de lleno a menos de 15 segundos del final del asalto inicial.