El oponente, ampliamente favorito, señaló que nadie había considerado al excampeón mundial súper ligero de la AMB como “un boxeador de élite”. Todo formaba parte de la estrategia promocional de García para sacar de quicio a Romero.
La verdad es que García sabía, por sus sesiones de sparring hace ocho años y por lo que había escuchado de otros boxeadores que enfrentaron a Romero sin cabezal, que
la pelea del viernes por la noche en Times Square sería complicada. Obviamente, el pegador mexicano-estadounidense esperaba ganar, al igual que las casas de apuestas, que lo colocaban como favorito 11 a 1.
Sin embargo, Romero, de 29 años, demostró desde temprano en el segundo asalto lo que García ya sabía antes de subir al ring.
Romero (17-2, 13 nocauts) derribó a García con un gancho de izquierda que marcó el ritmo del combate a 12 asaltos en peso wélter. El nativo de North Las Vegas también se defendió bien del característico gancho de izquierda de García y evitó que encontrara su ritmo en una pelea que, en general, careció de acción.
El resultado fue la victoria más significativa en la carrera profesional de ocho años de Romero: un triunfo por decisión unánime que frenó el impulso de
García rumbo a su esperada revancha con Devin Haney.“Creo que Rolly es mucho mejor de lo que la gente cree”, dijo García en la rueda de prensa posterior a la pelea. “Tiene manos muy fuertes, es sólido en general. No puedes simplemente entrar ahí y pensar que vas a conseguir lo que quieras. Pega fuerte, pero no creo que el sparring haya influido. Fue simplemente cómo se dieron las cosas esta noche. No fue mi noche”.
García (24-2, 20 nocauts, 1 sin decisión) y Haney (32-0, 15 nocauts, 1 sin decisión), quien venció de forma técnica a José Ramírez en la pelea coestelar del viernes, firmaron contrato para enfrentarse de nuevo en octubre. No está claro si ese combate se llevará a cabo.
El polarizante desempeño de García no justifica una gran bolsa para otra pelea con Haney, quien tampoco ofreció un espectáculo entretenido.
La jueza Waleska Roldán le dio solo dos asaltos a García. El peleador de Victorville, California, perdió 118-109 en su tarjeta. Los jueces Tony Paolillo (115-112) y Tom Schreck (115-112) vieron ganar siete asaltos a Romero, quien no pareció afectado por los golpes de García.
García le dio crédito a Romero después del combate. A diferencia de muchos de sus contemporáneos, no puso excusas por su pobre actuación.
A pesar de su actitud provocadora antes del combate, García, de 26 años, no subestimó a Romero, ya que sabía perfectamente a qué se enfrentaba en el evento principal de la cartelera al aire libre “FATAL FURY: City of the Wolves” de The Ring.
“Siempre supe que él iba a ser lo que demostró ser”, dijo García, quien peleaba por primera vez en más de un año. “Siento que enfrenté al boxeador más peligroso de la cartelera. Cualquiera con ese tipo de poder es alguien de quien debes cuidarte… Yo pensaba que Rolly iba a vencer a Tank. Simplemente no hice lo que tenía que hacer esta noche.”
Keith Idec es redactor sénior y columnista de The Ring. Se le puede contactar en X @idecboxing