ATLANTIC CITY, Nueva Jersey – La segunda aparición de Ray Ford en la división de las 130 libras fue considerablemente más impresionante que su debut cinco meses atrás.
El habilidoso zurdo desmanteló a Thomas Mattice y se llevó con facilidad su combate a 10 asaltos por decisión unánime la noche del sábado, en la cartelera preliminar del evento encabezado por Jaron Ennis y Eimantas Stanionis, celebrada en el Boardwalk Hall. El oriundo de Camden, Nueva Jersey, conectó combinaciones con consistencia y utilizó su velocidad de manos y movilidad para desconcertar a Mattice en esta pelea coestelar transmitida por DAZN.
Los tres jueces —Lynne Carter, John McKaie y John Signorile— lo vieron ganar todos los asaltos, puntuando 100-90 a favor de Ford.
Ford (17-1-1, 8 KOs) expresó a Chris Mannix de DAZN, durante la entrevista posterior al combate, que se sentía decepcionado por no haber noqueado al veterano Mattice, de 34 años, a quien reconoció por su resistencia. El púgil de Cleveland, Mattice (22-5-1, 17 KOs), nunca ha sido derrotado por nocaut ni nocaut técnico en sus 28 peleas profesionales.
A sus 26 años, Ford consiguió su segunda victoria en la categoría de peso superpluma, luego de perder su título mundial de peso pluma de la AMB ante el invicto británico Nick Ball por decisión dividida el 1 de junio en el Kingdom Arena de Riad, Arabia Saudita. En su regreso al ring, el pasado 9 de noviembre, superó por decisión unánime al puertorriqueño Orlando González en diez asaltos, en la cartelera previa al Ennis vs. Karen Chukhadzhian en el Wells Fargo Center de Filadelfia.
La mayoría de los asaltos entre Ford y Mattice fueron de dominio total para Ford.
El octavo asalto mostró a un Mattice cada vez más pasivo, mientras Ford intensificaba su ofensiva en el último minuto. Para entonces, estaba claro que Mattice se conformaba con completar los diez asaltos, aun sabiendo que la victoria en las tarjetas era prácticamente imposible.
Ford cerró fuerte los dos últimos asaltos y aseguró una victoria amplia y clara en las tarjetas.
En el séptimo asalto, Mattice logró colar una derecha que obligó a Ford a amarrarlo momentáneamente, en uno de los pocos momentos de éxito para el boxeador de Cleveland.
En el sexto episodio, un gancho de derecha de Ford estremeció a Mattice, obligándolo a retroceder, mientras el dominio del neojerseíta se hacía evidente. Con mayor velocidad y fortaleza, Ford castigó a Mattice al cuerpo y al rostro durante los asaltos cuarto y quinto, alternando su ataque tanto en retroceso como en avance.
En el tercer round, otro gancho de derecha de Ford forzó a Mattice a sujetarlo de nuevo. Un recto de izquierda, un minuto después, también logró llamar la atención del veterano.
En el segundo asalto, una potente izquierda hizo retroceder a Mattice hasta las cuerdas, donde la velocidad y potencia de Ford continuaron haciéndole daño.
Apenas 40 segundos después de iniciado el primer round, una combinación izquierda-derecha-izquierda de Ford envió a Mattice contra las cuerdas, obligándolo a amarrarse. Mattice sonrió en señal de reconocimiento ante la precisión de la combinación. Aunque más alto y con experiencia en peso ligero y superligero, el poder de Ford pareció sorprenderlo desde el primer asalto.
Keith Idec es redactor senior y columnista de The Ring. Puede ser contactado en X (anteriormente Twitter) como @idecboxing.