MONTREAL – Osleys Iglesias estuvo a la altura de su apodo de “El Tornado” la noche del jueves, castigando a Vladimir Shishkin de principio a fin hasta forzar una detención en el octavo asalto en su combate eliminatorio por el título de peso supermediano de la FIB.

No hubo tiempo para estudiarse, ya que ambos peleadores buscaron arrancarle la cabeza al otro desde la campana inicial.

Esa fue la tónica a lo largo de la pelea, pero Iglesias causó más daño gracias a su poder, que desgastó al combativo ruso.

A finales del tercer asalto, una combinación de dos golpes hizo que las piernas de Shishkin se doblaran y su rostro comenzara a marcarse.

Para el quinto, la capacidad de Iglesias de lastimar a Shishkin creó una clara separación entre los peleadores. Sin embargo, Shishkin, que tenía en su esquina al entrenador de Tyson Fury, Sugar Hill, siguió respondiendo a pesar del castigo.

Iglesias, quien tuvo cuatro combates el año pasado que sumaron un total de nueve asaltos, se mantuvo firme en su deseo de darle al público el nocaut que querían.

Finalmente, tras cortar a Shishkin en el séptimo asalto, lo lastimó en el octavo y luego siguió con una ráfaga que llevó al árbitro Mike Griffin a intervenir a los 1:28.