MONTREAL — Christopher Guerrero se impuso por decisión unánime en diez asaltos al veterano mexicano Oliver Quintana para conquistar el título vacante Continental de las Américas del CMB, en una velada celebrada este jueves en el Casino de Montreal, transmitida por ESPN+.
El púgil de 23 años conectó los golpes más vistosos a lo largo del combate y mandó a la lona a Quintana en los asaltos 5, 7 y 10, camino a tarjetas de 99-88, 98-89 y 98-89.
“Les dije que iba a ganar”, declaró Guerrero emocionado mientras se abrazaba con su promotor Camille Estephan en un momento lleno de emoción.
Más tarde, elogió la presencia del campeón mundial en cuatro divisiones Terence Crawford, quien estaba entre los asistentes: “Fue un honor pelear frente al mejor boxeador del mundo”.
A pesar de lo abultado del resultado en las tarjetas, Guerrero tuvo que esforzarse desde el inicio, sufriendo una leve abrasión sobre su ojo izquierdo ya en el segundo asalto.
El combate se encendió en el tercero, cuando un potente gancho de izquierda hizo retroceder a Quintana. Ambos intercambiaron combinaciones, y aunque Guerrero conectó una derecha limpia, el mexicano se mantuvo en pie.
Sin embargo, no por mucho tiempo: Quintana fue lastimado en el quinto asalto y cayó tras una combinación relampagueante, aunque logró sobrevivir los segundos finales del episodio.
En los siguientes asaltos, Guerrero mostró señales de fatiga antes de recuperar energía con su “segundo aire”.
En el séptimo, Quintana volvió a visitar la lona tras un golpe que pareció más un resbalón que un impacto decisivo, pero el árbitro contó la caída.
Con renovado ímpetu, Guerrero buscó el nocaut en los últimos rounds. Aunque logró un nuevo derribo, no le alcanzó para forzar la detención del combate.
En la pelea coestelar, Mary Spencer retuvo su título mundial AMB del peso superwélter (154 libras) al imponerse por decisión unánime en diez asaltos a la venezolana Ogleidis Suárez.
Spencer, ubicada en el puesto número 4 del ranking de The Ring en su categoría, volvió a sus raíces amateur y priorizó el boxeo técnico sobre la fuerza bruta, estrategia que en ocasiones le ha traído espectáculo pero también problemas ante rivales escurridizas.
La canadiense de 40 años lució suelta, trabajó detrás del jab y utilizó bien el cuadrilátero para imponer el ritmo del combate. Aunque Suárez tuvo momentos destacables y dejó el pómulo de Spencer visiblemente enrojecido tras conectar con solidez, la campeona fue quien llevó la mejor parte de la acción, especialmente en los asaltos intermedios.
Spencer también sangró por la nariz, pero mantuvo el control. Suárez, profesional desde 2006, echó mano de toda su experiencia para mantenerse competitiva, aunque sin ganar la mayoría de los asaltos.
En los compases finales, Spencer tuvo la oportunidad de buscar el nocaut, pero prefirió seguir boxeando con inteligencia y cerrar con autoridad.
Las tarjetas oficiales le otorgaron la victoria por 100-90 (dos veces) y 99-91.
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