Manny Pacquiao regresó a Los Ángeles esta semana y comenzó los entrenamientos con un puñado de opciones a considerar para su próxima pelea.

Podría ser una revancha contra Floyd Mayweather, una exhibición frente a Vasiliy Lomachenko o una pelea por el título contra el campeón wélter de la AMB, Rolando Romero.

Los planes están en el aire por el momento para Pacquiao, quien tendrá 47 años cuando vuelva a subir al ring en 2026.

El Pacquiao de 46 años (62-8-3, 39 nocauts) regresó de un retiro de cuatro años en julio y dejó una actuación sólida contra el campeón del CMB, Mario Barrios. Aunque la mayoría de los observadores cree que el miembro del Salón de la Fama hizo lo suficiente para ganar, los jueces lo vieron de otra manera y calificaron el combate como un empate mayoritario.

Robert Garcia, el Entrenador del Año 2024 de The Ring, tuvo dos oportunidades para intentar vencer a Pacquiao en su apogeo y no tuvo éxito en ninguna de ellas con Antonio Margarito (UD 12 en 2010) y Brandon Ríos (UD 12 en 2013).

Aunque Pacquiao ya no opera en el punto máximo de sus capacidades, Garcia cree que el ícono filipino aún puede mantenerse firme y competir.

“Puede que ya no tenga mucha gasolina en el tanque, pero tiene la suficiente para competir contra tipos como Barrios o Rolly”, dijo Garcia a The Ring. “Rolly es la pelea perfecta para él. Después de Barrios, la gente piensa que Rolly es el que no debería ser tan complicado.

“Es feo decirlo, porque Barrios es una muy buena persona y un buen chico. Pero escogieron a Barrios en julio porque pensaron que era el campeón más accesible de la división de 147 libras. Yo pensaba que Barrios iba a manejar a Pacquiao con bastante facilidad y que lo vencería sin problemas, pero ocurrió lo contrario. La mayoría de la gente pensó que Pacquiao lo había logrado.

“Con eso mismo, fue una victoria para Manny. Si lo hubieran destruido y derrotado, entonces habría sido un retiro obvio. Pero ahora está en posición de otra gran pelea para disputar otro título mundial.”