El estilo emocionante y de alta presión de Jack Rafferty le ha valido los títulos británico y de la Commonwealth en la categoría superligero, posicionando al púgil de Oldham entre los mejores de una competitiva división británica de las 140 libras.

Desde que dio el salto al nivel de campeonato, el invicto Rafferty, de 29 años (26-0, 17 KOs), ha acumulado seis victorias consecutivas por la vía del nocaut, ampliando la racha invicta más larga del boxeo británico. Sin embargo, es consciente de la necesidad de mantener el impulso que ha logrado construir.

El campeón unificado e invicto de la RING, Oleksandr Usyk, y el monarca de la FIB, Daniel Dubois, protagonizarán una revancha por el título indiscutido del peso pesado el 19 de julio en el estadio de Wembley, en Londres. Rafferty tiene la mira puesta en formar parte de esa cartelera.

—Sí, y creo que hay una pelea que lo merece. Se ha mencionado varias veces el nombre de Mark Chamberlain —declaró Rafferty a The Ring—.

—En abril, ambos peleamos en la misma velada y estuvimos sentados uno al lado del otro en la conferencia de prensa. Él tenía un trabajo que hacer y yo también.

—No veo razón por la cual no sea una pelea lo suficientemente atractiva como para estar en la cartelera de Usyk-Dubois, el 19 de julio en Wembley. Definitivamente vale como una nueva defensa de los títulos británico y de la Commonwealth, e incluso podría estar en juego algún cinturón adicional.

Tras años de lucha en el circuito de pequeñas salas, Rafferty ha sabido adaptarse a la vida en los grandes escenarios.

El pasado octubre desgastó al talentoso zurdo y múltiple campeón amateur nacional, Henry Turner, en nueve asaltos para conquistar el título británico. Desde entonces, ha regresado con triunfos por nocaut ante Reece MacMillan y Cory O'Regan.

Mark Chamberlain (17-1, 12 KOs), también zurdo y con poder de nocaut, ascendió rápidamente en la categoría ligero y el año pasado fue protagonista en tres funciones de la Riyadh Season. Posteriormente subió a la división superligero, tras sufrir una sorpresiva derrota por decisión en diez asaltos ante Josh Padley, en la misma velada donde Dubois noqueó a Anthony Joshua en septiembre.

Ambos púgiles están firmados con Queensberry Promotions, y Rafferty ve una pelea con Chamberlain en un escenario de esta magnitud como la plataforma ideal para dar el siguiente paso en su carrera.

—Si quiero estar en estas grandes carteleras, tengo que enfrentarme a grandes rivales, y eso es exactamente lo que quiero hacer —afirmó Rafferty—.

—Es una pelea que merece estar en un evento de esta envergadura, y son precisamente estos los combates en los que quiero participar.

—Mark tiene un nombre, yo también me estoy haciendo un nombre, y creo que podría ser el combate de la noche en una cartelera histórica. Dos orgullosos británicos peleando por el título nacional en un estadio repleto, con todo el mundo del boxeo mirando, y ambos con algo que demostrar.

—La pelea va a suceder tarde o temprano. ¿Por qué no puede ser el 19 de julio?