El estrellato le resulta natural a
Hamzah Sheeraz cuando pelea en el Reino Unido. Sin embargo, cuando está en Estados Unidos, las gafas de sol que utiliza para pasar desapercibido no le hacen falta.
Desde que debutó como profesional en 2017, Sheeraz ha realizado toda su carrera en suelo británico. Cuenta con una base sólida de fanáticos que lo adoran, pero su ambición va más allá: quiere reconocimiento mundial.
Y eso solo será posible si decide plantar bandera y establecerse en América. Ansioso por alcanzar la fama, el estatus de estrella y la admiración del público, ha decidido salir a la carretera.
Según a quién se le pregunte, este combate se perfila como una contienda muy pareja. No obstante, Sheeraz enfrenta varios desafíos. Para empezar,
su rendimiento genera dudas. En su última presentación, tuvo dificultades ante Carlos Adames y se vio obligado a conformarse con un empate por decisión dividida. Además, Berlanga parte con una ventaja física, ya que es un supermediano natural.
Aun así, a pesar de que las cartas no están del todo a su favor, Sheeraz es consciente de lo que podría significar una victoria sobre Berlanga.
Algunas cosas son evidentes. Sheeraz ha expresado en numerosas ocasiones su deseo de enfrentar a
Canelo Álvarez algún día. Una victoria el 12 de julio podría acercarlo considerablemente a ese objetivo. Además, más allá de un posible duelo ante Álvarez, su perfil internacional podría elevarse de forma exponencial.
Sin embargo, el brillo de los reflectores no lo deslumbra. Sabe que no basta con derrotar a
Berlanga: debe hacerlo de manera contundente.
“Poca gente en Estados Unidos sabe quién soy”, declaró Sheeraz en una entrevista reciente con Cornerman Boxing. “Esta es mi oportunidad de llegar a lo más alto, siempre y cuando dé una actuación devastadora”.