Un Gary Allen Russell Jr. emocional y físicamente marcado regresa tras una inactividad de 42 meses el 19 de julio cuando se enfrente a Hugo Castaneda en una pelea de peso ligero a 10 asaltos en la cartelera secundaria de Manny Pacquiao vs. Mario Barrios en Las Vegas.

Largos periodos de inactividad no son nada nuevo para Russell, de 37 años, quien peleó solo una vez por año entre 2015 y 2020, ninguna en 2021, y viene de una derrota por decisión mayoritaria durante una defensa del título pluma del CMB contra Mark Magsayo en enero de 2022.

Durante esa derrota, Russell (31-2, 18 nocauts) peleó con un tendón desgarrado en el manguito rotador derecho que requirió cirugía tres meses después.

Después, perdió a su padre y entrenador, Gary Russell Sr., quien falleció en mayo de 2022 a los 63 años tras una larga lucha contra la diabetes tipo 2. Todavía estaba de duelo por la muerte de su hermano menor, Gary "Boosa" Russell, a quien perdió en diciembre de 2020 a los 25 años debido a un paro cardíaco.

Con su vida trastornada, volver al ring era lo último en lo que pensaba Russell en ese momento. Pero ahora, está listo para comprometerse de nuevo con el deporte en una pelea que será transmitida en la parte no paga por evento de la cartelera de Prime Video del próximo fin de semana.

“He aprendido, gracias a mi ADN, que fui diseñado para superar este tipo de cosas”, dijo Russell Jr. durante una reciente conferencia de prensa. “Muchas veces, la gente se rinde porque no sabe cómo superar los obstáculos. La vida se trata de superar los obstáculos que se presentan. Hay que tener resiliencia mental. Me alegra tener una mente lo suficientemente fuerte como para mantenerme enfocado.”

Russell dijo que ahora tiene la custodia de los tres hijos de Boosa y que hay un total de ocho niños en su casa. Siempre ha sido un asunto familiar para los Russell.

También está entrenando a sus hermanos tras el fallecimiento del patriarca, ayudando al campeón del mundo de la AMB en las 140 libras, Gary Antuanne Russell (18-1, 17 nocauts), y al contendiente del peso pluma junior Gary Antonio Russell (20-1, 13 nocauts).

“Ahora que estoy compitiendo de nuevo, mis hermanos menores me están ayudando a entrenar,” dijo Russell. “Es genial que las dinámicas cambien así, incluso un rey necesita tener la mente abierta para aceptar críticas constructivas. Estoy usando todo eso como combustible para avanzar.”

Russell fue bastante activo hasta su primera derrota ante el recién retirado Vasiliy Lomachenko en junio de 2014. Desde entonces ha peleado solo ocho veces, con sus mejores victorias ante Jhonny González por nocaut técnico en el cuarto asalto en marzo de 2015 y ante el entonces invicto Joseph Diaz Jr. por decisión unánime en 12 asaltos tres años después.

“Me hubiera encantado competir con más frecuencia,” dijo Russell. “Pero si quieres que sea directo, cuando estaba en la cima de mi nivel, muchos de estos tipos no tenían prisa por subirse al ring y competir conmigo. No puedo obligarlos a pelear. Tenía que enfrentar a mis retadores obligatorios y al siguiente mejor disponible porque no podía conseguir peleas de unificación de títulos.”

Se espera que Russell aplaste a Castaneda (15-2-1, 11 nocauts), quien fue noqueado por el prospecto cubano Demler Zamora en menos de cuatro asaltos en abril, antes de pasar a desafíos más grandes e importantes.

“Estoy sintiendo los nervios típicos de una buena pelea,” dijo Russell. “Realmente se vuelve más emocionante a medida que nos acercamos a la pelea. Me alegra estar listo para salir ahí y mostrarle mis habilidades al mundo.

“El boxeo es un estilo de vida para mí. Lo he practicado toda mi vida. Siempre quise volver al deporte. Quise tomarme un tiempo después de que falleció mi padre, y después de que falleció mi hermano menor. Fue mucho lo que tuve que detenerme, reflexionar, reprogramarme y concentrarme.

“Aún no siento que mi brazo esté al 100 por ciento sano, pero sí creo que está lo suficientemente bien como para mostrar mis habilidades y demostrar que soy uno de los mejores del mundo. Mi lesión me obligó a dejar de entrenar y me estaba volviendo loco. Poco a poco lo recuperé y pude exigirme un poco más para probar si podía soportarlo — y puedo soportarlo.”

Tras una carrera completa como peso pluma, Russell, oriundo de Capitol Heights, Maryland, ahora compite en las 135 libras y estaría encantado de pelear en un combate que defina la supremacía regional entre Gervonta Davis, de Baltimore, Maryland, y Lamont Roach Jr., de Upper Marlboro.

Se suponía que Davis y Roach se enfrentarían el 16 de agosto en una revancha tras su controvertido y muy disputado empate mayoritario en marzo, aunque el arresto del primero por cargos de violencia doméstica pone en duda el calendario de la segunda pelea.

“Tenemos que decidir quién es el mejor de la zona, así que eso haría de Davis o Roach un oponente interesante,” dijo Russell. “Cuando estaba en la cima de mi carrera, Tank siempre fue uno de esos tipos que siempre estaba ahí. Nunca hubo antipatía ni mala sangre, pero somos peleadores, y yo estoy tratando de ver quién es el mejor.”