Jaron Ennis no se queja de los nocauts que podrían ser dignos de un reel de lo más destacado ni de las grandes sumas de dinero que ha recibido, pero todo lo que siempre quiso fue una oportunidad para brillar.

El boxeo es un deporte peculiar. Si ciertos peleadores dudan en subirse al ring contigo, ¿sabes qué? Simplemente no lo harán.

Ennis (33-0, 29 KOs) fue el típico caso de alto riesgo y baja recompensa. Es decir, la paliza que probablemente iba a repartir no valía la pena el pago. En ese punto, Ennis tomó lo que pudo conseguir. Pero mientras eliminaba nombres de menor nivel, esperaba que su arduo trabajo eventualmente rindiera frutos.

Oficialmente, esos largos entrenamientos y carreras sin descanso lo han llevado al escenario en el que siempre supo que pertenecía. El 12 de abril, Eimantas Stanionis subirá al ring cuando ambos se enfrenten en el evento principal en Atlantic City.

Cuando Ennis se llama a sí mismo el mejor del resto, algunos pueden considerarlo arrogancia. Él lo llama confianza. Pero aunque se vea a sí mismo como el máximo exponente de la división welter, eso no significa que no respete a Stanionis. Desde su punto de vista, Stanionis (15-0, 9 KOs) es excelente por derecho propio, lo que hace de su unificación un evento que no te puedes perder.

“Sé que soy el mejor en la división welter,” dijo Ennis en The Porter Way Podcast. “Él es el segundo mejor. El mejor luchando contra el mejor.”

Stanionis nunca ha tenido miedo de Ennis ni de nadie más, para el caso. El número 2 de The Ring en la clasificación welter y titular del cinturón de la WBA viene de una victoria contundente sobre Gabriel Maestre.

Ennis no es el único que camina con una gran dosis de confianza. En ese departamento, Stanionis le hace frente.

Ahora, todo se reduce a quién es el mejor peleador. Esa respuesta, según Ennis, será dolorosamente obvia una vez suene la campana.

“Lo verán el 12 de abril.”