Desde joven, Julio Gervacio fue señalado como una futura estrella y llegó a sostener brevemente un título mundial del peso supergallo a fines de los años ochenta.
Uno de nueve hermanos, Gervacio nació en La Romana, República Dominicana, el 17 de octubre de 1967.
“Éramos una familia muy humilde”, contó Gervacio a
The Ring a través de Mauricio González. “Vengo de una familia trabajadora; mi padre trabajaba en la construcción. No teníamos mucho, pero tampoco nos faltaba nada.”
Comenzó a boxear desde pequeño y disputó alrededor de 70 combates aficionados, ganando varias medallas.
Sus padres ya no estaban juntos, y cuando su padre obtuvo la residencia para mudarse a la vecina isla de Puerto Rico, Gervacio, con apenas 14 años, decidió acompañarlo.
Continuó su carrera boxística en Puerto Rico, donde conquistó un torneo de los Guantes de Oro.
Aún siendo adolescente, Gervacio —quien acumuló un récord cercano a 60-15 como amateur— debutó como profesional en diciembre de 1985.
“Tenía una mentalidad sin miedo, no sentí nervios al debutar”, recordó Gervacio, quien ganó $1500 en su primera pelea. “Tenía mucha confianza en mis capacidades.”
Empató dos de sus primeros cuatro combates, pero elevó su récord a 15-0-2. Después de apenas 23 meses como profesional, se enfrentó al campeón mundial de la AMB en las 122 libras.
“[Louie] Espinoza peleó con un tipo con el que yo solía guantear todo el tiempo, Tommy Valoy, y yo le di una paliza”, explicó Gervacio, quien ganó por decisión unánime en 12 asaltos.
“Eso me dio mucha confianza. Era mi primera pelea por título, pero tenía la mentalidad de que podía ganar. Fue increíblemente emotivo, algo indescriptible.”
Sin embargo, su paso por la cima fue breve: tres meses después perdió el cinturón ante el habilidoso Bernardo Piñango (Decisión dividida en 12 asaltos).
“Le regalaron ese título”, comentó aún molesto por el fallo. “Piñango tenía buen movimiento, se desplazaba mucho. Era un peleador muy sucio porque usaba los codos.”
Gervacio regresó rápidamente y sumó cuatro victorias antes de disputar el título inaugural de la OMB en el peso supergallo frente a Kenny Mitchell en abril de 1989.
“Comencé algo lento, y cuando empecé a atacar ya había ganado confianza, pero no logré noquearlo”, dijo Gervacio, quien perdió por decisión unánime en 12 asaltos.
Ese mismo año cayó ante Orlando Fernández (KO 9) y no volvió a pelear durante casi dos años y medio.
“Tuve algunos problemas matrimoniales”, explicó Gervacio, “y me fracturé la mandíbula contra Orlando; estaba recuperándome, por eso me tomé ese tiempo.”
Regresó en marzo de 1992, y el estilizado boxeador-pegador encadenó 10 victorias consecutivas antes de enfrentar a su compatriota Héctor Acero-Sánchez por el título del CMB en las 122 libras, en Atlantic City, en marzo de 1995.
“Fue una pelea muy dura”, recordó. “A veces era difícil encontrarlo. Yo gané esa pelea, incluso lo derribé, aunque creo que no contaron la caída. Pero él era más joven, estaba con Don King, y decidieron darle a él el título y la victoria. Ya sabes cómo funciona esto.”
Gervacio permaneció un par de años más en el circuito, pero en gran medida se convirtió en escalón para futuras figuras, como el entonces ascendente Juan Manuel Márquez (KO 8) en peso pluma y Joel Casamayor (TKO 2) en superpluma.
“Entré demasiado confiado, y empecé a darle confianza a Márquez; él fue creciendo en la pelea”, reconoció sobre su combate con el futuro miembro del Salón de la Fama.
“[Márquez] era realmente bueno. Estaba empezando su carrera, tenía unas 15 peleas, pero ya mostraba talento y habilidad.”
“Tenía mucha confianza al entrar con Casamayor. No sentía miedo, pero eso me costó caro porque fui directo hacia él, y esa fue la causa de la derrota.”
Desde entonces, Gervacio (30-7-2, 23 KOs) tuvo algunos problemas con la ley. En 2002, un tribunal de Nueva York lo condenó por distribución de narcóticos. Fue deportado en 2009. En 2011, volvió a ser arrestado en Puerto Rico por entrar ilegalmente a Estados Unidos.
Hoy, a sus 58 años, Gervacio está divorciado y tiene 14 hijos. Reside en la República Dominicana, aunque sus hijos viven en EE. UU. Permanece vinculado al boxeo como entrenador, trabajando con varios miembros del equipo nacional amateur dominicano.
Los Mejores a los que se Enfrentó Julio Gervacio (por categorías)
MEJOR JAB
Juan Manuel Márquez: Técnicamente era tan preciso que cada vez que me golpeaba, sentía el jab.
MEJOR DEFENSA
Bernardo Piñango: Escurridizo, difícil de alcanzar y muy astuto.
MAYOR VELOCIDAD DE MANOS
Orlando Fernández: Un gran boxeador, muy rápido, y fue capaz de alcanzarme y noquearme.
MEJOR JUEGO DE PIERNAS
José Valdez: Casamayor y Márquez tenían sus virtudes, pero siento que Valdez tenía el mejor juego de pies.
MÁS INTELIGENTE
Márquez: Probablemente el más inteligente y calculador; observaba mis movimientos antes de lanzar y era muy certero. No desperdiciaba golpes.
MÁS FUERTE FÍSICAMENTE
Louie Espinoza: Siempre estaba encima de mí, sin duda el más fuerte, pero mi movilidad y todo lo demás me ayudaron a ganar.
MEJOR QUIJADA
Márquez: Le pegué con todo y no pude derribarlo.
PEGA MÁS DURO
Joel Casamayor: Perdí con Márquez por nocaut; me derribó, pero pude levantarme. Cuando Casamayor me golpeó, no pude recuperarme en absoluto.
MEJOR TÉCNICA BOXÍSTICA
Márquez: Enfrenté a grandes rivales, pero Márquez supo aprovechar su talento y habilidad para tener la carrera que tuvo. Recién comenzaba, pero ya se veía su calidad.
MEJOR EN GENERAL
Márquez: Un boxeador completo, excelente en todos los aspectos. Era una persona muy pensante y metódica.
Preguntas o comentarios pueden enviarse a Anson en elraincoat@live.co.uk - y pueden seguirlo en X: @AnsonWainwright