El aguerrido puertorriqueño Román "Rocky" Martínez ganó el título de peso superpluma de la WBO en tres ocasiones entre finales de la década de 2000 y mediados de la de 2010.

Martínez, quien fue uno de diez hermanos, nació y creció en Vega Baja, en el centro-norte de Puerto Rico, una ciudad famosa por sus playas bañadas por el sol, la agricultura y la industria, el 31 de enero de 1983. Su padre trabajaba en la construcción y con autos, mientras que su madre era ama de casa.

"Mi crianza fue humilde", dijo Martínez a The Ring. "Siempre con respeto, la disciplina es lo importante, no las cosas materiales".

Desde pequeño, disfrutaba del deporte y jugaba regularmente voleibol y corría maratones antes de ser llevado al gimnasio.

"Siempre me gustó el boxeo desde los 12 años, mi tío comenzó a llevarme al gimnasio, luego mi tía y también entrené con mi papá en casa", dijo. "Cuando comencé a boxear me gustó, digo que nací para esto porque entrenaba los domingos, los días festivos, todos los días, no había días libres. Eso fue lo que me dio mis grandes victorias".

Aunque Martínez no logró ganar un título nacional en el ámbito amateur, participó en muchos torneos y acumuló un récord de 60-16. Sin embargo, tuvo dificultades para conseguir peleas y decidió que su futuro estaba en el boxeo profesional.

El puertorriqueño debutó ganando $400, al vencer a Wilfredo Ramos en cuatro asaltos en diciembre de 2001.

En los años siguientes, Martínez ascendió en los rankings, destacándose con victorias sobre el experimentado José Soto Karass (DU 10), demostrando su poder en los asaltos finales contra Daniel Jiménez (KO 12) y consolidando sus credenciales de campeón ante el veterano Walter Estrada (DU 10).

La gran oportunidad de Martínez llegó cuando viajó a Mánchester, Inglaterra, para enfrentar al campeón mundial superpluma de la WBO, Nicky Cook, en marzo de 2009.

"Fue muy difícil porque tuve que pelear para ser el número uno en los rankings", dijo sobre su camino hacia la cima. "El entrenamiento fue súper fuerte; hicimos muchas rondas de sparring.

"La pelea comenzó muy bien, en el segundo asalto él me conectó un buen golpe y sonó la campana. Le dije a [mi entrenador Raúl] 'Papo' [Torres]: 'Voy a meter presión'. No quería perder y salí a pelear hasta que llegó el nocaut en el cuarto asalto".

Fue un momento especial y uno que disfrutó enormemente.

"Celebré esa pelea como nunca antes porque todo el esfuerzo y el sacrificio valieron la pena", dijo con orgullo. "Luego llegué a Puerto Rico y fui recibido por el pueblo de Vega Baja y el alcalde de Dorado. Mi barrio me recibió de manera increíble".

Martínez defendió su título contra Feider Viloria (KO 9) y Gonzalo Munguía (KO 4) antes de ser tentado a regresar al Reino Unido, esta vez a Glasgow, Escocia, para enfrentar al poco conocido Ricky Burns en septiembre de 2010.

"Lo derribé, pero era muy escurridizo", dijo Martínez, quien perdió su invicto y su título por decisión unánime en una dura pelea de 12 asaltos. "La derrota fue mi culpa por no seguir las instrucciones de mi promotor Peter Rivera y de mi equipo. Cuando peleaba en Puerto Rico, era por poco dinero y menos riesgo. Peter me dijo: 'Rocky, es mejor en Puerto Rico', pero no le hice caso. Quería pelear en el extranjero por más dinero, pero al final fue un mal negocio porque tuve más gastos y salí peor.

"Manejé [bien la derrota], Peter me dijo: 'No te preocupes, te haré campeón otra vez'".

Después de más de un año fuera del ring, Martínez comenzó de nuevo su ascenso. Tuvo que esperar su oportunidad y, cuando Adrien Broner, quien había ganado el título vacante tras la subida de Burns al peso ligero, no dio el peso para una pelea posterior, el campeonato quedó vacante y Martínez fue emparejado con Miguel Beltrán en la cartelera de Sergio Martínez vs. Julio César Chávez Jr. en el Thomas & Mack Center de Las Vegas en septiembre de 2012.

"Fue mucha exposición y eso era importante para mí", dijo sobre su aparición en el evento de HBO Pay-Per-View. "Fue una pelea cerrada [pero gané por decisión dividida en 12 asaltos], estuve atacando y conecté los golpes más duros.

"Recuperar el título para mí fue genial porque trabajé para ello. Otra oportunidad para seguir creciendo en el boxeo y poder generar más dinero".

El ofensivo peleador no pudo separarse del aguerrido mexicano Juan Carlos Burgos (E 12) en el famoso Madison Square Garden en la primera defensa de su segundo reinado y luego superó por decisión dividida en 12 asaltos al invicto Diego Magdaleno en Macao.

Sin embargo, Martínez perdió su título ante Mikey García por nocaut en el octavo asalto (KO 8) en Corpus Christi, Texas, en noviembre de 2013.

"Tuve un buen comienzo en la pelea hasta que lo derribé [en el segundo asalto], pero el peso me afectó y estaba débil", explicó. "Pesé 129 libras en el pesaje y solo me rehidraté hasta 133 libras. Estuve muchos años en las 130 libras, desde que era amateur. Sin excusas, me ganó".

Martínez se tomó un tiempo fuera antes de regresar un año después con una victoria en peso ligero. Sin embargo, fue atraído de nuevo a las 130 libras para enfrentar al verdugo de los boxeadores puertorriqueños, Orlando Salido.

"Quería esa pelea y le dije a Peter que lo vencería, él me dijo lo mismo", comentó Martínez, quien derribó a Salido en los asaltos 3 y 5 para reclamar una dura victoria por decisión unánime en 12 asaltos.

"La pelea fue grandiosa porque él había noqueado a Juanma [López] dos veces. Sentía que lo iba a vencer y entrené fuerte para eso. Presionaba mucho, lanzaba muchos golpes por todos lados, mis muslos y piernas. Tuve cuidado de utilizar bien mi mano derecha en la pelea y lo logré. El trabajo se hizo en el gimnasio con mi equipo, especialmente con mi entrenador, Raúl 'Papo' Torres".

Debido a la naturaleza emocionante de la primera pelea, ambos combatientes acordaron una revancha en la cartelera de Floyd Mayweather Jr. vs. Andre Berto en Las Vegas en septiembre de 2015.

"El día de la pelea, sonó una alarma y tuvimos que bajar todo el equipo corriendo, supongo que fue un truco", recordó antes de centrarse en lo que ocurrió en el combate.

"Fue una pelea cerrada, lo derribé, pero dijeron que fue un resbalón. Fue una pelea pareja, pero yo conecté los golpes más claros. Fue un empate".

Luego, fue emparejado con el talentoso doble campeón olímpico Vasiliy Lomachenko, quien buscaba convertirse en campeón mundial en una segunda división en el boxeo profesional. Ambos se enfrentaron en el Madison Square Garden en junio de 2016.

"[Lomachenko] me ganó muy bien", dijo Martínez en una evaluación muy honesta de la pelea en la que fue noqueado en el quinto asalto. "Hizo su trabajo; fue superior en todo".

Después de dos años y medio fuera del ring, regresó con una victoria en Puerto Rico antes de perder ante Yuriorkis Gamboa por nocaut en el segundo asalto (KO 2) de una manera desafortunada, lo que lo llevó al retiro.

"Gamboa no dio el peso y me ordenaron hacerme un examen ocular la mañana de la pelea", dijo, aún molesto por la situación. "Eso fue un error, porque las pupilas se dilatan y ves borroso. No tuve opción: o peleaba o me iba. Con esa pelea siempre me quedé con la espina. Nunca llegué a ver los golpes, era como en cámara lenta".

Eso marcó el final de la carrera de Martínez, quien se retiró con un récord de (30-4-3, 18 nocauts).

Desde entonces, ha permanecido involucrado en el boxeo trabajando como entrenador en el gimnasio de Dorado y actualmente está ayudando a los jóvenes. Entre los boxeadores con los que trabaja se encuentra Danielito Zorrilla, quien desafió sin éxito a Regis Prograis por el título mundial superligero del WBC en 2023. También entrena a Miguel Marrero, Edgardo Rolls y Ryan Enoch Rodríguez, además de varios peleadores que están cerca de convertirse en profesionales.

Martínez, ahora de 42 años, está casado y tiene dos hijos. Sigue viviendo en Vega Baja y ha invertido en casas, las cuales alquila.

Se tomó amablemente el tiempo para hablar con The Ring sobre los mejores rivales a los que enfrentó en 10 categorías clave.

Mikey Garcia: "Cada vez que me daba el jab, [era] muy fuerte."

Vasiliy Lomachenko: "Debido a sus movimientos laterales y de cintura."

Lomachenko: "Muy versátil en sus movimientos para lanzar golpes. Muy explosivo cuando ataca."

Lomachenko: "Un peleador sobrenatural, con mucha velocidad y explosividad."

Garcia: "Muy inteligente, no toma muchos riesgos, nunca. Siempre esperando la oportunidad."

Garcia: "Era de tamaño normal en el pesaje, pero al día siguiente, estaba muy grande y fuerte en la pelea."

Miguel Beltrán: "Le conecté buenos golpes y mostró mucha resistencia."

Mikey Garcia: "Garcia golpeaba muy fuerte. Cada vez que me pegaba, sentía sus nudillos. Fue el pegador más duro que enfrenté en mi carrera."

Lomachenko: "Lomachenko era un talento natural. Sus movimientos y golpes desde diferentes ángulos. Y su experiencia tanto como amateur como profesional."

Lomachenko: "Mikey Garcia era fuerte y paciente, pero el mejor peleador fue Lomachenko por su velocidad, poder, gran versatilidad, movimientos y estrategia."