Steve Maylett sabe lo que se necesita para llegar a la cima.

A lo largo de los años, este entrenador afincado en Mánchester ha forjado, de forma silenciosa, una reputación como uno de los técnicos más respetados del Reino Unido. Sin embargo, aún es más conocido por haber llevado a Terry Flanagan al título mundial de peso ligero de la OMB.

Tras el retiro de Flanagan, el gimnasio The Finest Gym se quedó sin su principal figura, pero el trabajo nunca se detuvo. Luego de haber llevado a su amigo a lo más alto, Maylett siguió en silencio con su misión de formar nuevos campeones.

Durante los últimos 12 meses, las incontables horas en el gimnasio comenzaron a dar frutos.

Jack Rafferty conquistó los títulos británico y de la Commonwealth en peso superligero, además de extender la racha invicta más larga del boxeo británico. Zak Miller no tardó en seguirle los pasos: el peleador de 28 años se coronó campeón inglés en peso pluma y luego sumó los cinturones británico y de la Commonwealth tras vencer al aguerrido Masood Abdullah.

Este fin de semana, Maylett volverá a estar en la esquina, esta vez con Liam Taylor (28-2-1, 14 KOs), quien buscará convertirse en el tercer campeón británico del gimnasio cuando desafíe al monarca del peso wélter, Conah Walker (15-3-1, 6 KOs), en Birmingham. El evento será transmitido a nivel mundial por DAZN en la cartelera de Matchroom.

“Ese es el objetivo. Hemos puesto todo el trabajo durante los últimos años. La gente piensa que todo sucede de la noche a la mañana, pero nosotros simplemente nos mantenemos fieles al boxeo, y los chicos no faltan ni un solo día,” declaró Maylett a The Ring.

“Están aquí todo el tiempo, y siempre les he dicho: ‘Si se mantienen firmes, sé que cuando llegue su oportunidad, la van a aprovechar’. Y para Liam, esa oportunidad ha tardado mucho en llegar.”

Esta será la segunda oportunidad de Taylor por el título británico de peso wélter. En 2019, derribó al entonces campeón Chris Jenkins en los primeros compases y dominaba en las tarjetas cuando un choque accidental de cabezas abrió una vieja herida en la ceja del galés, conocida por su fragilidad, a solo cuatro segundos del final del cuarto asalto.

La pelea se detuvo inmediatamente y fue declarada empate técnico. Si Jenkins hubiera llegado al final del round, el combate habría ido a las tarjetas, y Taylor habría sido proclamado campeón.

No recibió una revancha inmediata, y esos cuatro segundos se han convertido en más de cinco años de espera.

“Tuvimos que mantener activo a Liam con peleas de rodaje. Trabajamos su ascenso en los rankings,” explicó Maylett. “Ganó el título europeo de la OMB y pensé que eso lo convertiría en retador obligatorio al título británico, pero no fue así. Tuvo que hacer otra pelea y entonces, finalmente, lo nombraron retador oficial.”

Salvo por un combate sin mucho que perder ante David Avanesyan en 2021 por el título europeo —en el que perdió por nocaut en el segundo asalto—, Taylor ha peleado en la sombra desde aquel duelo con Jenkins. Esa derrota no mató su ambición, y ha esperado pacientemente por otra oportunidad.

Maylett ha seguido guiándolo, y lo tiene listo para este sábado en el mejor estado posible.

“Sé lo bueno que es. Ha hecho sparring con campeones mundiales: Terry Flanagan, Kell Brook, Josh Taylor y Liam Smith,” aseguró.

“Esos son cuatro boxeadores de clase mundial y él —honestamente— siempre lo ha hecho muy, muy bien con ellos. También ha hecho sparring con campeones europeos y británicos. Ese es el nivel de Liam Taylor.”

“No ha tenido suerte, pero es uno de los mejores boxeadores que he tenido en el gimnasio. Es fuerte físicamente y siempre ha tenido una gran inteligencia boxística. Entiende el deporte. Lleva años en esto y tuvo un buen recorrido como amateur. Conoce el juego.”

“Pero al final del día, es solo otra pelea. Es solo otro campamento. Es lo que hacemos.”

The Finest Gym es un entorno exigente para trabajar día a día. Maylett vive y respira boxeo y admite que pasa casi todas las horas del día buscando formas de mejorar a sus peleadores.

Él espera el mismo nivel de compromiso por parte de sus púgiles. Aunque los boxeadores de su gimnasio son conocidos por su fortaleza física, Maylett también los somete a pruebas mentales.

Ese esfuerzo compartido ha forjado una fuerte atmósfera de equipo. Taylor es el miembro más veterano del gimnasio, y los primeros meses difíciles que Rafferty y Miller pasaron entrenando a su lado les enseñaron lo que realmente se necesita para triunfar.

Si logra unirse a ellos como campeón británico en activo, sería una victoria muy celebrada y una merecida recompensa a años de trabajo constante.

“Han estado juntos en el gimnasio durante años, y hemos hecho el trabajo. Lo hicimos a la antigua, a la manera difícil,” dijo Maylett.

“Son etapas. Al principio les cuesta, lo encuentran duro.”

“Pero cuando ven que están mejorando, cambia todo. Los llevo a hacer sparring contra peleadores de nivel británico o europeo y les va bien. Tres meses después los enfrentan de nuevo, y lo hacen aún mejor. Entonces tienen ese pequeño rayo de luz: ‘Esto es durísimo, pero está funcionando’.”

“Luego ganan un pequeño título y entienden que el trabajo da resultado. Yo siempre les digo: ‘Si quieres ser campeón, tienes que entrenar como un campeón mundial’.”