LAS VEGAS –
Anthony Olascuaga encarna el espíritu de la nueva serie de The Ring, “The Underdog”, un evento que encabezará este jueves en el Fontainebleau por DAZN al defender su título mundial mosca OMB frente a Juan Carlos Camacho-Rivera.
El púgil angelino de 26 años es un campeón poco expuesto, pues ha peleado más veces en el extranjero que en Estados Unidos durante sus cinco años de carrera. Cuando Olascuaga (9-1, 6 KOs) suba al ring contra Camacho-Rivera (19-1, 8 KOs), será la primera vez que su madre esté presente para verlo pelear en directo.
“Estoy muy ilusionado con esta oportunidad. Es un sueño hecho realidad encabezar un show en Las Vegas”, dijo Olascuaga a
The Ring.
Sus últimas cinco peleas han sido en Japón. Allí sufrió su primera derrota profesional por nocaut ante
Kenshiro Teraji en abril de 2023, y en julio de 2024 noqueó a Riku Kano para conquistar la corona que ahora porta. Desde entonces, ha defendido con éxito el título en dos ocasiones, la más reciente en marzo contra Hiroto Kyoguchi.
Ese impulso ha permitido que “La Princesa” –quien suele lucir un colorido cabello– se enfoque plenamente en su carrera boxística y deje atrás trabajos como taxista o peluquero para llegar a fin de mes.
Olascuaga está rodeado de un equipo de primer nivel, encabezado por su entrenador de siempre, Rudy Hernández, finalista al premio de The Ring a Entrenador del Año 2024, y comparte entrenamientos con
Junto Nakatani, séptimo en la clasificación libra por libra de la revista.
“Aprendo mucho trabajando con Junto, y cada vez que regresa de Japón está en un nivel superior”, explicó Olascuaga, quien ha compartido cientos de asaltos de sparring técnico con el japonés. “Es como un ajedrez amistoso, pero yo también mejoro con cada sesión.
Van a ver una versión nueva y mejorada de mí contra Camacho-Rivera, equilibrando mi defensa con agresividad ofensiva. Estoy justo donde quiero y necesito estar. Después de vencerlo, quiero unificar más cinturones.”
Olascuaga conoce bien a Camacho-Rivera porque fungió como analista televisivo en su victoria por decisión dividida sobre Jayson Mama en octubre.
“Lo vi pelear de primera mano desde ringside”, relató Olascuaga. “Es un rival formidable. Hablé un poco con él y me pareció un buen tipo dentro y fuera del ring. Pero la noche de la pelea no será mi amigo.”
Camacho-Rivera cayó dos veces contra Mama pero logró imponerse. En su última salida, en marzo, apenas logró otra victoria por decisión dividida en ocho asaltos frente a un rival modesto en México con récord de 6-6-2.
“Veo algunas grietas en su estilo que puedo explotar”, señaló Olascuaga. “Es un contragolpeador defensivo que suele pelear en retroceso. Tiene muchas aberturas para mi derecha. Solo necesito crear ángulos y meter mis golpes. Tengo que ser responsable en defensa, no puedo entrar solo buscando el nocaut. Ya veremos cómo se desarrolla la pelea.
Dada la oportunidad que tengo, quiero lucirme con una victoria por nocaut. No puedo esperar a subir al ring y soltar las manos para dar un espectáculo emocionante. Tengo el poder, y todos los que entrenan conmigo me lo dicen. Necesito demostrar que tengo ese instinto de guerrero cuando se enciendan las luces.”
Manouk Akopyan es redactor principal de The Ring. Síguelo en X e Instagram: @ManoukAkopyan.