LONDRES, Inglaterra — Daniel Dubois estaba decidido a escribir su propia historia y convertirse este fin de semana en el primer campeón indiscutido de los pesos pesados de Gran Bretaña desde Lennox Lewis en 1999, en el estadio de Wembley.

Pero Egis Klimas, mánager de Oleksandr Usyk, ya ha escuchado ese tipo de promesas antes.

Tras una serie de enfrentamientos verbales con Tyson Fury y su equipo durante sus dos combates el año pasado, Klimas, de 60 años, no se deja impresionar por la idea de que el sábado Gran Bretaña se llenará de orgullo.

Al contrario, está convencido, como muchos analistas neutrales, de que el campeón unificado y número uno de The Ring, Usyk (23-0, 14 KOs), conseguirá otra victoria ante un rival británico, desmantelando de nuevo al campeón FIB Daniel Dubois, casi dos años después de su primer duelo en Wroclaw, Polonia.

“Hemos vuelto aquí a Londres. Mira, ya lo hizo una vez y lo hará de nuevo. Estamos muy confiados como equipo. Es el mismo tipo, ¿qué puede haber cambiado en un par de años? No puedes entrenar tu mente, esa es su debilidad,” aseguró Klimas durante la conferencia de prensa del jueves.

Esa fue su respuesta directa a Frank Warren, promotor de Dubois, quien aseguró que Daniel está entrando en su mejor momento. Y aunque pueda sonar exagerado, no está del todo fuera de lugar.

Dubois viene de victorias ante Jarrell Miller y Filip Hrgovic, rivales invictos en combates considerados 50-50, y además sorprendió al superar a Anthony Joshua, dos veces campeón unificado, que se esperaba que le diera una lección.

“Si miras su historial, tiene experiencia, un gran equipo detrás, ya ha compartido ring con Oleksandr, sabe que puede lastimarlo y lo ha hecho antes, ha vencido a boxeadores de clase mundial. Creo que lo va a lograr, de verdad lo creo,” insistió Warren.

“Él es diferente a esos tres boxeadores, y el sábado se hará historia, ya lo verás,” respondió Klimas, antes de que Usyk repitiera en inglés forzado: “Don’t push the horses” —una referencia a no apresurar las cosas por parte del equipo británico.

Dubois llega motivado y en forma para hacer lo que nadie ha logrado —Mairis Briedis fue el que más cerca estuvo—, aunque no ha boxeado en diez meses, algo que no es precisamente una señal alentadora para un púgil en su supuesto pico de rendimiento.

Joseph Parker, su rival original para el 22 de febrero, estaba entre el público y confirmó su deseo de enfrentar a Usyk si se le diera la oportunidad. El neozelandés (36-3, 24 KOs) es un claro ejemplo de los beneficios de mantenerse activo, y nadie imaginaba que volvería a estar en el centro de atención tras una victoria discreta por puntos sobre Jack Massey hace dos años y medio.

Un mes antes, Joe Joyce —quien derrotó a Parker— y Usyk estaban en primera fila viendo la trilogía entre Fury y Chisora que nadie pidió. Fury declaró entonces que Joyce era el hombre más temido de la división y que Usyk, tras destronar a Joshua, tendría que hacer más que vencer “a un fisicoculturista” para merecer la oportunidad de enfrentarlo.

El tiempo vuela.

En un mundo ideal, Dubois-Parker se habría reprogramado para definir el primer contendiente, pero la realidad fue otra. Parker incluso tuvo que pedir su oportunidad frente a Usyk en un evento de boxeo a puño limpio en Italia, justo un día antes de que se anunciara oficialmente Usyk-Dubois 2 el pasado 27 de abril.

El entrenador principal de Dubois, Don Charles, aseguró que ya no era momento de hablar y que no diría mucho, pero no pudo evitar lanzar una réplica:

“Debe haber estado dormido las últimas tres peleas de Daniel. ¿Puede alguien despertarlo, por favor?”

Klimas respondió con tranquilidad: “Mientras yo dormía, Oleksandr venció dos veces a Tyson Fury.”

El amigo de Usyk y director deportivo Sergey Lapin, encogiéndose de hombros, calificó de ilusión el supuesto crecimiento de Dubois desde su primera pelea.

Para frustración de Riz Khan, mánager de Dubois, el sábado por la noche se resolverán muchas preguntas en la cima de la división reina, donde todo puede cambiar con un solo golpe.

Usyk, siempre exitoso en Inglaterra desde que ganó el Campeonato de Europa en Liverpool en 2008, soñaba con salir a Wembley como futbolista profesional.

En cambio, hará su primera aparición bajo el icónico arco del estadio nacional buscando convertirse en campeón indiscutido en dos divisiones y tres ocasiones distintas, enfrentando a Dubois, 11 años más joven.