Richard Torrez ha pasado oficialmente de ser una promesa a un contendiente notable.
Siempre hay una pelea que lleva a un boxeador al siguiente nivel. Para el exmedallista olímpico de plata, su momento de consagración llegó el pasado fin de semana contra Guido Vianello.
Ser el evento principal de su propio cartel fue un momento llamativo para Torrez. Antes de dirigirse al cuadrilátero en el Palms Casino Resort de Las Vegas, Nevada, se tomó un momento para asimilarlo todo. Pero aunque disfrutó del instante, se aseguró de no dejarse absorber por él.
Torrez (13-0, 11 nocauts) lució bien ahí fuera, superando a Vianello en velocidad y esfuerzo.
En este tipo de eventos, es común ver la aparición de boxeadores aleatorios. Eso es lo normal. Efe Ajagba, quien siempre ha sido una cara familiar en la escena de los pesos pesados, se hizo presente en primera fila. Pasó la mayor parte de la noche observando cada movimiento de Torrez. Cuando sonó la campana final, el fornido peso pesado le dio una ovación de pie.
Una victoria sobre Vianello no cambiará su vida, pero sí puso a Torrez en el mapa. Ahora, el ruido que está generando ha captado la atención de Ajagba. Un enfrentamiento entre ellos no está en proceso, no se ha discutido y simplemente no está en el horizonte. Pero estamos hablando de boxeo. Todo puede cambiar en un abrir y cerrar de ojos.
Si por casualidad los dos pesos pesados en ascenso llegan a enfrentarse, Ajagba (20-1, 14 nocauts) estaría dispuesto. Aunque Torrez parece ser el tipo de boxeador difícil de manejar, Ajagba agradecería la oportunidad de demostrar que enfrentar a Vianello es una cosa, pero enfrentarlo a él es algo completamente diferente.
“Sé cómo manejar la presión,” le dijo Ajagba a Sean Zittel. “No es nada nuevo para mí. Sé cómo pelear contra zurdos. Si Torrez quiere pelear conmigo, estoy listo.”
No esperes que Ajagba presione para un enfrentamiento con Torrez. Bueno, tal vez lo haga, pero solo si primero vence a Martin Bakole. Ambos se enfrentarán oficialmente el 3 de mayo en Arabia Saudita.
Bakole no se vio como ese tipo al que muchos llaman el “cuco” la última vez que se le vio. Pero haber peleado con muy poca anticipación contra Joseph Parker y ser detenido violentamente no ha dañado su espíritu ni su confianza. Ajagba lo sabe, por eso no lo está subestimando. Solo si el contendiente de 30 años logra derribar a Bakole de la cima de los pesos pesados, un enfrentamiento con Torrez tendría más sentido.
“Por ahora, estoy enfocado en Martin Bakole.”