WEMBLEY, NORTE DE LONDRES – A casi dos años de su primer enfrentamiento, Oleksandr Usyk (23-0, 14 KOs) y Daniel Dubois (22-2, 21 KOs) se volverán a enfrentar, esta vez en un escenario distinto: el Wembley Stadium, terreno familiar para el británico, donde consiguió la mejor victoria de su carrera al noquear a Anthony Joshua el pasado septiembre.

Con el doble de capacidad que el estadio de Wroclaw, Wembley será el escenario del intento de redención de Dubois, enfrentando al invicto campeón unificado ucraniano. Usyk, recordemos, cedió su cinturón de la FIB el verano pasado para permitir que Dubois y Joshua pelearan por el título vacante.

Durante la conferencia de prensa del martes, el entrenador principal de Dubois, Don Charles, reconoció los logros de Usyk, pero mantuvo una postura firme: sostiene que el ucraniano engañó al árbitro Luis Pabón con sus gestos y reclamos cada vez que Dubois lanzaba golpes al cuerpo, lo que condicionó la percepción del referí y lo llevó a una decisión equivocada durante el combate que terminó en nocaut técnico en el noveno asalto.

"Como entrenador de boxeo, te tengo mucho respeto. Lo que lograste es notable.

Pero me decepciona que hayas caído tan bajo como para imprimir la imagen del golpe que te dejó temblando.

La actuación que hiciste esa noche merece un Oscar o un Emmy. Engañaste al árbitro, a nosotros, al mundo del boxeo.

Siempre he sostenido eso, y lo seguiré diciendo.

Te proclamas como un hombre temeroso de Dios, pero el octavo mandamiento dice: no mentirás."

Durante la pelea original, Usyk recibió un golpe al cuerpo en el quinto asalto que el árbitro puertorriqueño Luis Pabón consideró bajo. El ucraniano recibió un largo tiempo de recuperación, aunque no se le descontó ningún punto a Dubois, lo que generó polémica posterior.

"Dios te ha convocado para que Daniel se tome la revancha," continuó Charles.

El mánager de Usyk, Egis Klimas, advirtió a Charles que evite llamar a su boxeador un tramposo, y que cualquier queja debería dirigirse al árbitro con más de 30 años de experiencia.

Cuando el periodista Dev Sahni preguntó si Usyk se habría levantado si el golpe hubiera sido considerado legal, Charles no titubeó:

"Yo estaba a dos metros de la acción.

No lo digo solo porque sea mi boxeador, pero no había forma en el mundo de que Usyk se levantara.

Su sistema nervioso central se apagó, por eso estaba temblando.

En ningún momento se llevó las manos a la ingle, como haría alguien si el golpe hubiera sido bajo.

Se tocaba el área del estómago.

Usyk condicionó al árbitro desde el primer minuto, señalando constantemente hacia abajo.

Pabón es un ser humano, y simplemente entró en pánico.

Cuando alcanzas cierto nivel, recibes favoritismos.

Pero el 19 de julio, lo vamos a examinar e investigar.

Ese día, te vamos a desenmascarar."