Con presencia en cada cuenta de Netflix en todo el mundo, Canelo vs. Crawford ha irrumpido en la corriente principal global. La marca de Riyadh Season se extiende desde el Strip de Las Vegas hasta el Allegiant Stadium. Incluso el aficionado más casual ahora es consciente de la determinación de Arabia Saudita y de Turki Alalshikh por organizar una velada de magnitud sin precedentes.

Mucho menos publicitados, sin embargo, están los púgiles saudíes que se preparan en relativo anonimato. Entrenando en aislamiento en el gimnasio The Summit en el remoto paraje de Big Bear Lake, California, se encuentran bajo la tutela del reconocido entrenador Abel Sánchez.

Mohammed Alakel, Sultan Al-Mohammed y Abdullah Darkazanly han optado por demostrar en vez de hablar, dejando que sus puños transmitan el mensaje. Sultan Alsheikh, quien dirige el Mike Tyson Boxing Club en Riad, gestiona el campamento de los boxeadores y quiere mostrar otra faceta del negocio del boxeo saudí.

“Es una plataforma enorme y nos sentimos honrados de ser parte de ella”, dijo. “El boxeo siempre ha estado presente en nuestra cultura. Gracias a la visión y guía de Su Excelencia Turki Alalshikh, lo estamos llevando aún más lejos.

Todos los peleadores y aficionados quieren formar parte de lo que hemos construido en Riad, desde los espectáculos hasta los gimnasios — todos están viniendo aquí. Hemos mostrado al mundo de qué es capaz Arabia Saudita.

Ahora, estamos emocionados de venir a Estados Unidos y mostrar al mundo lo que nosotros, como saudíes, podemos hacer.”

Alakel (5-0-0) no es ajeno a los grandes escenarios, habiendo peleado en las carteleras de Usyk-Fury y Bivol-Beterbiev II.

Tras un nocaut en el primer asalto en agosto, es consciente de su potencial pero mantiene los pies en la tierra en el camino hacia la cima.

“Lo que tenga que pasar, pasará. El nocaut en mi última pelea salió de manera natural, no lo forcé”, comentó Alakel. “Hemos estado trabajando en cerrar ángulos y siento que Abel me está ayudando a golpear con propósito.

Me siento más agresivo, pero de manera inteligente — defensiva. Y cuando pego, siento el impacto.”

El saudí destaca el aislamiento de Big Bear y la variedad de sparrings en California como claves para el progreso del equipo.

“Ha ido muy bien. Es un lugar muy aislado”, dijo. “Voy del gimnasio a casa, del gimnasio a casa — en repetición.”

Pese al frenesí mediático y la inversión del Reino, los boxeadores saudíes se han mantenido discretos, decididos a dejar que sus actuaciones hablen.

“Tenemos que trabajar duro. No dejamos que los medios nos distraigan”, dijo Alakel. “Lo más importante es poner el trabajo, confiar en Alá y luego lo demás se dará.

Nos motivamos entre nosotros.”

Ese espíritu nacional y de superación también impregna el entrenamiento.

“Es bueno tener a tu gente entrenando contigo. Por ejemplo, en los sprints, nadie se guarda nada. Ver a uno ir más rápido que el otro te empuja. Es muy competitivo, pero de una buena manera.”

El sparring, en cambio, ha sido un proceso mucho más internacional.

“En cada esquina hay un gimnasio en California. Así que recibes muchos estilos distintos y variedad de sparrings”, explicó.

En cuanto a su actuación del sábado, Alakel se muestra confiado.

“Voy a boxear como sé boxear, pero me encantaría que terminara en nocaut, obviamente. Pero voy a hacer lo mío. Voy a dar un gran espectáculo para ustedes y verán una estrella en ascenso.”

También en la cartelera estará Sultan Al-Mohammed, de Yeda, un talento emergente saudí que debutará como profesional en un evento de alcance mundial.

“No hay presión”, aseguró. “Estoy emocionado de mostrar mis habilidades en una plataforma tan grande.”

Darkazanly (2-0-0), originario de Riad y visto por última vez en Usyk-Fury II, quiere dejar huella en su regreso al ring.

“Desde mi última pelea he usado el tiempo sabiamente”, dijo. “He trabajado duro, aprendido nuevas técnicas y estoy listo para mostrarle a la gente mi siguiente nivel.”

Este fin de semana representa la oportunidad para que los boxeadores saudíes salgan de las sombras y se coloquen bajo los reflectores.

Por toda la inversión y el espectáculo que rodea esta cartelera, será la acción en el ring la que defina verdaderamente la noche.

Los peleadores saudíes están listos para hacer su parte y llevar el boxeo de Arabia Saudita aún más lejos en el ámbito mundial.