David Benavidez ha tenido la fortuna de ganar mucho dinero a lo largo de su carrera.
Esos millones le permiten llevar un cierto estilo de vida, pero no es la riqueza lo que lo motiva. La fama y el dinero son grandes recompensas —así como aparecer
en la portada de la edición de octubre de The Ring—, pero cuando cuelgue los guantes, quiere que su legado en el ring sea lo que lo defina.
“Les garantizo que, cuando termine mi carrera, seré uno de los mejores boxeadores de todos los tiempos”, declaró el púgil de 28 años en su canal de YouTube, Benavidez Family.
Esa noche,
Anthony Yarde intentará poner fin a su reinado y comenzar el suyo propio.
El británico, dos veces retador al título de las 175 libras, parte como amplio desfavorecido, aunque recientemente ha demostrado pelear con un renovado espíritu de prueba.
Desde su derrota por nocaut técnico ante Artur Beterbiev hace dos años, Yarde ha hilado cuatro victorias consecutivas, dos de ellas por nocaut.
Benavidez (30-0, 24 KOs) ha visto algunas de esas actuaciones, pero asegura que vencerlo no le otorgará reconocimiento mundial: su objetivo es dar una lección contundente.
Yarde (27-3, 24 KOs) le recuerda
a otro joven talentoso que derrotó, David Morrell, a quien superó el pasado 1 de febrero en Las Vegas por decisión unánime.
A pocos meses de su regreso, Yarde ha intensificado sus declaraciones, amenazando con lastimar al astro libra por libra, algo que Benavidez no se toma en serio.
Para él, cada rival que se cruce en su camino recibirá una paliza, incluyendo Yarde.
“No voy a detenerme hasta lograr lo que me propuse,” aseguró Benavidez.
“Quiero ser el número uno.”