David Adeleye está decidido a aplicar las lecciones aprendidas durante un frustrante 2025 y a causar un impacto real en la división de los pesos pesados.

Adeleye (14-2, 13 KOs) cerró 2024 con un espectacular nocaut en el primer asalto sobre el entonces invicto Solomon Dacres, pero le costó capitalizar ese impulso.

En abril se mostró fuera de ritmo y se quedó rápidamente sin ideas durante su pelea por el título británico vacante ante Jeamie TKV. Tras cinco asaltos apagados, Adeleye derribó a TKV con un gancho de izquierda que conectó instantes después de que el árbitro ordenara la separación. Evitó una sanción y aprovechó la apertura para detener a su compatriota londinense momentos más tarde.

Por controvertida que fuera la victoria, le valió un combate en agosto frente a Filip Hrgovic.

Adeleye no fue superado con claridad por el experimentado croata, pero quedó la sensación de que pudo haber hecho mucho más con su gran oportunidad y terminó cayendo por una amplia decisión a 10 asaltos.

«2025 no fue el mejor año, pero 2026 es el año en el que tengo que rectificar eso. Hacer que la gente se olvide de 2025 y presentarme con un tipo de fuerza diferente», dijo a talkSPORT Boxing.

«La pelea con Jeamie fue un desastre y luego estuvo la de Hrgovic, que no salió a mi favor.

«Analizo los aspectos positivos, los negativos y todo lo demás, pero al mismo tiempo soy un hombre que sabe lo que es real, así que la gente no necesita decirme ciertas cosas porque ya sé cómo son cuando llego a casa. Tengo buenas personas a mi alrededor que simplemente me dicen las cosas como son».

Adeleye es un boxeador seguro de sí mismo, pero pareció pasar gran parte de la pelea con Hrgovic dudando de sus propias decisiones.

Cuando confió en sus instintos y tomó la iniciativa, logró incomodar y lastimar a Hrgovic, pero mantuvo las manos bajas durante demasiado tiempo y permitió que los asaltos se le escaparan.

La pelea no puso fin a los sueños de Adeleye de competir entre la élite mundial, pero sí dejó claro que, aunque pueda tener todas las condiciones físicas necesarias para ser un peso pesado de primer nivel, aún debe encontrar la mejor manera de utilizarlas.

Adeleye tiene 29 años, pero si logra aprender de los diez asaltos compartidos con Hrgovic, todavía dispone de tiempo de sobra para dejar huella al más alto nivel.

«Volví a ver la pelea y podría haber hecho muchas cosas diferentes», afirmó.

«Podría haber hecho mucho más. No fue una pelea que me quedara grande. Podría haberla ganado con claridad y ahora estaría sentado aquí en una posición muy distinta.

«Es algo que tengo que asumir; es una píldora amarga que debo tragar. En 2026 tengo que presentarme de otra manera».