Dalton Smith sabe que un tropiezo inesperado podría asestar un golpe fatal a sus aspiraciones de conquistar un título mundial. Sin embargo, el británico insiste en que ha aprendido a manejar la presión de cara a su combate de este fin de semana ante el canadiense Mathieu Germain.
El púgil de Sheffield, de 28 años, es el retador obligatorio al título mundial del peso superligero del CMB, cinturón que Alberto Puello conquistó recientemente tras una ajustada victoria sobre Sandor Martin. Smith está haciendo todo lo posible para asegurarse de que sus armas estén lo más afiladas posible cuando llegue su oportunidad.
En enero, Smith (17-0, 13 KOs) despachó sin piedad a Walid Ouizza en el primer asalto, adjudicándose así el título europeo vacante. En lugar de quedarse inactivo, aceptó rápidamente mantenerse en ritmo ante el veterano canadiense Germain (26-2-1, 11 KOs).
El evento será transmitido por DAZN desde el Park Community Arena de Sheffield, un recinto de ambiente íntimo que ha sido testigo del crecimiento de la carrera de Smith.
Ni Ouizza ni Germain son nombres reconocidos a nivel mundial, pero al haberlo posicionado a las puertas de una pelea titular, el equipo de Smith no está dispuesto a arriesgarlo en una contienda pareja que ponga en peligro años de trabajo y estrategia.
En una era en la que muchos boxeadores se mantienen inactivos durante meses, esperando su oportunidad y corriendo el riesgo de oxidarse, al menos Smith se mantiene activo y en el radar del público.
El británico asegura que estar tan cerca de una pelea por el campeonato del mundo no le genera ninguna carga mental.
“Lo curioso es que, cuando comenzaba mi carrera profesional, sentía la presión. ‘Tengo que ganar’, pensaba”, comentó Smith en la conferencia de prensa final del jueves.
“Me estresaba semanas antes. No sé si es algo que viene con la madurez como boxeador, pero ahora es como si ni siquiera sintiera que tengo una pelea. Voy al gimnasio, entreno duro y tal vez sea eso, la confianza que me da el trabajo que realizo. Sé que cuando llega la noche de la pelea, no hay estrés, porque me he preparado demasiado bien para ello.
“No siento presión. ¿Cuál es la presión? La única presión es que lo hago por mí mismo. Lo hago por mi equipo, no por nadie más”.
Mathieu Germain representa el último obstáculo entre Smith y su tan ansiado combate por el título mundial. Smith no tiene intención de prolongar más de lo necesario esta etapa. Si supera a Germain, su enfoque total se dirigirá a Alberto Puello y al codiciado cinturón verde y oro del CMB.
“No estoy subestimando el sábado por la noche, pero me he preparado bien y espero una gran actuación”, declaró. “Sin faltarle el respeto, pero primero me encargo de Mathieu Germain, y después voy a salir a cazar a Alberto Puello por ese título mundial del CMB.
“No lo digo para generar expectativa. Es que tengo hambre, y deseo esto más que nunca”.