LAS VEGAS – Cuando Terence Crawford se estaba preparando para enfrentarse a Errol Spence Jr. por el título indiscutido de peso wélter hace dos veranos, la charla promocional previa a la pelea sobre el futuro de Spence se centraba en que el tejano se acercaba a su planeado intento contra Canelo Álvarez, si lograba vencer a Bud.

Ese resultó ser un gran “si”, y un fallo, ya que Crawford destrozó a Spence con una paliza unilateral y aplastó la idea de un choque Canelo-Spence que alguna vez estuvo previsto para el AT&T Stadium en Texas.

En 2022, el jefe de TGB Promotions, Tom Brown, dijo que ofreció a Álvarez 50 millones de dólares por una pelea contra Spence en 164 libras como parte de un acuerdo de dos combates que habría comenzado con Álvarez enfrentando a Jermall Charlo. En cambio, Álvarez siguió adelante para enfrentarse a Dmitry Bivol, pero el entrenador y mánager de Álvarez, Eddy Reynoso, dijo que una pelea con Spence eventualmente sucedería.

Mientras todo se le prometía a Spence, Crawford estaba en segundo plano, indudablemente abriéndose camino poco a poco y manifestando el enfrentamiento con Álvarez. Su victoria que definió su carrera contra Spence le permitió empezar a tomar sus propias decisiones y, durante su vuelta triunfal, el único peleador que estaba en el centro de sus llamados era el indiscutido rey del peso supermediano, Álvarez.

Misión cumplida.

El sábado, dentro de un estadio de fútbol diferente, el Allegiant Stadium en Las Vegas, dos de los mejores peleadores de su generación se enfrentarán por la supremacía en un mega combate que se transmitirá globalmente en Netflix.

“Estuve pensando en esta pelea antes de subir a 154,” dijo Crawford a los periodistas. “Quería ir directamente de 147 a 168, porque nunca se había hecho antes contra un peleador top cinco libra por libra como Canelo.

“Mucha gente quiere ver esto, y si este peleador puede subir a este peso y vencer a este peleador. Mantiene vivo el deporte. Ser el mejor peleador libra por libra significa que puedes vencer a cualquier peleador en cualquier peso. Yo siento que, si puedo dar el mismo peso que otro peleador, entonces debo poder vencerlo, porque soy el número uno del mundo.”

Después de noquear a todos los que enfrentó en 147 libras durante una racha de ocho peleas de 2018 a 2023, Crawford subió a 154 libras en agosto y derrotó a Israil Madrimov por decisión unánime para ganar el título de la AMB.

Crawford (41-0, 31 nocauts) comenzó a aumentar de peso a principios de este año una vez que la pelea con Álvarez (63-2-2, 39 nocauts) se hizo realidad, publicando una foto en marzo en la que decía pesar 186 libras. Desde entonces, ha compartido más fotos de su físico marcado.

Crawford y Canelo parecen tener el mismo tamaño cuando se paran uno al lado del otro. Pero en la noche de la pelea, el ligero favorito en las apuestas, Álvarez, sin restricciones de peso, se espera que domine a su oponente de complexión naturalmente más pequeña.

“Las divisiones de peso existen por una razón” es una frase que se repite desde las figuras más importantes del deporte hasta la sección de comentarios.

Al implacable Crawford no le podría importar menos, sin embargo, porque está tan confiado como lo estuvo en 2023 cuando fijó su radar en Álvarez poco después de vencer a Spence.

El oriundo de Nebraska cree que pertenece al Monte Rushmore del boxeo si gana la pelea.

“No soy nuevo en esto,” dijo Crawford. “Todo me impresiona de Canelo. Soy un gran fan de Canelo. Pero esto es negocio. Vengo a quitarle todo lo que tiene Canelo.”