Normalmente, cuando dos de los mejores peleadores de una división se enfrentan, se esperan fuegos artificiales. Como mínimo, se anticipa un combate parejo, con acción de ida y vuelta y un desenlace incierto.
Pero eso no fue lo que ocurrió con Jaron Ennis vs. Eimantas Stanionis.
El mes pasado, ambos se enfrentaron oficialmente en Atlantic City, Nueva Jersey. El boxeo es un deporte diverso, donde rara vez hay consenso entre fanáticos. Sin embargo, antes del combate entre Ennis y Stanionis, muchos coincidían en que, aunque Ennis (34-0, 30 KOs) era el favorito, Stanionis tenía el nivel y la dureza necesarios para dar pelea.
Brian Norman Jr. era uno de los que le daban una oportunidad real a Stanionis. Pero Ennis pareció tomar eso como una ofensa personal y salió decidido a imponer condiciones desde el inicio. El astro de Filadelfia necesitó apenas seis asaltos para detener a Stanionis (15-1, 9 KOs), quien no salió al séptimo por orden de su esquina.
Casi un mes después del combate, Norman revisita sus antiguas declaraciones, y admite que no fue completamente sincero sobre lo que pensaba del lituano.
“En su momento intenté ser respetuoso, pero sabía que no estaba a la altura,” dijo Norman a MillCity Boxing. “Vi a un peleador muy básico, muy lineal.”
Norman, que rara vez ofrece comentarios sin contexto, sabía que sus palabras podían malinterpretarse si no explicaba a fondo sus motivos. Por eso, se tomó el tiempo de señalar las debilidades en el estilo de Stanionis que, según él, explican su caída.
“Se iba a la guerra todo el tiempo,” continuó Norman. “Lanzaba muchos golpes, pero por alguna razón, no pasaba nada. Los rivales quedaban todos marcados, pero no se caían ni se detenían. No tiene poder en esos guantes. Es un costal. Solo un costal resistente.”
Brian Norman Jr. (23-0, 19 KOs) es una de las promesas emergentes en las 147 libras y, con declaraciones como estas, deja claro que no solo está atento al panorama de su división, sino que no teme analizarlo con franqueza.